Celedonio Jiménez
Como sociólogo que me figuro adscrito al pensamiento crítico, no me creo solo en el deber de evaluar las características de nuestra estructura social que tienen efectos adversos en la vida de los dominicanos.
También me siento inducido a destacar conductas de personas que reflejan la posesión de valores que propenden al desarrollo humano y social, como lo es la solidaridad.
Este es el caso de un joven y popular muchacho, que ahora ostenta el rango de héroe. Me refiero al adolescente Denis Manuel Batista, a quien he denominado “el héroe de la alcantarilla”, pues sin pensarlo mucho, tuvo la valentía de introducirse, para salvar a una niña, hasta el fondo de una cloaca filtrante abierta, en una de las calles del sector del Mirador Sur, en el Distrito Nacional.
La cuestión de los filtrantes o alcantarillados públicos viene a sumarse al problema del cual ya una vez hice referencia a lo que es para la integridad física, sobre todo de menores, la existencia de cañadas en muchos de nuestros barrios marginados.
Estos riesgosos escenarios son, de por sí, un llamado de alerta para las autoridades municipales, máxime conociendo, como se sabe, que individuos inconscientes e insensibles se dedican a sustraer las tapas de los filtrantes de calles y avenidas.
El caso de Denis Manuel Batista significa que, independientemente del camino equivocado que muchos jóvenes han tomado, o han sido inducidos a tomar, también hay una cantidad de nuestra muchachada que son héroes (en el deporte y las artes tenemos muchos casos) o poseen las potencialidades de tales.
Frente a esa realidad, se hace necesario hacer ver a nuestros niños y adolescentes lo importante que es que cada uno saque lo mejor de sí en las más variadas circunstancias; lo importante que es apreciar y actuar en función de que la solidaridad es uno de los valores más elevados, y una de las prendas humanas más excelsas; que asistir o socorrer a quien se encuentra en peligro o estado de apuro es una conducta a la que no debemos de negarnos.
La solidaridad muchas veces tiene riesgos y exige sacrificios.
Debemos ser capaces de brindarla aun cuando no nos sea grata debido a que supone posibles complicaciones. Debemos actuar como nuestro héroe, quien en el momento preciso actuó sin pensarlo mucho.
No seamos como aquellos insensatos que en momentos de tragedia o de posibles tragedia, lo que les interesa es tomar un video para luego exhibirlo.
Saludos a este nuevo y joven héroe popular, quien con su acción ejemplar se perfila como un muy buen ciudadano.
