Primer ministro francés, Édouard Philippe.
París.- El primer ministro francés, Édouard Philippe, aseguró hoy que entiende “la ira” expresada en las multitudinarias protestas de este sábado contra el aumento de los impuestos a los carburantes, conocidas como las de los “chalecos amarillos”, pero aclaró que mantendrán las tasas previstas.
“Tomé nota del carácter inédito de esa manifestación. Había muchos que se manifestaban por primera vez, no tienen líder. Hemos escuchado su ira, el sufrimiento y la ausencia de perspectivas”, dijo Philippe, en una entrevista emitida hoy en France 2.
El gobernante reconoció que esas manifestaciones responden a que “el poder púbico hace tiempo que no responde al sentimiento de abandono que siente parte de la sociedad».
Sin embargo, lamentó que en algunos de los más de 2.000 puntos de protesta del sábado la situación degeneró en el “caos».
Una jubilada resultó muerta, 409 personas resultaron heridas, 14 graves, y se produjeron 282 detenciones en las protestas convocadas por los “chalecos amarillos».
Tal y como había adelantado el ministro de Transición Ecológica, François de Rugy, el primer ministro aseveró que no recularán y que “la trayectoria carbón se va a mantener».
“Vamos a intentar a acompañar a los franceses en la transición ecológica, liberarles del petróleo”, agregó.
El Gobierno generó el descontento ciudadano al decretar un alza de los impuestos a los carburantes de 7,6 céntimos por litro para el diésel y de 3,9 céntimos para la gasolina para evitar el uso de vehículos contaminantes y promover la energía limpia. A partir de enero se aplicarán además tasas suplementarias de 6 y 3 céntimos, respectivamente.
