Puerto Rico conmemoró un año del paso del huracán María. AP
San Juan.- El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, dijo que nadie estaba preparado para enfrentarse a un huracán tan devastador como María, que justo hoy hace un año arrasó la isla caribeña provocado 2.975 muertos, la cifra oficial reconocida por el Ejecutivo.
Rosselló clausuró con un emotivo discurso de recuerdo a los fallecidos un acto en el que participaron representantes de distintas confesiones religiosas y que también tuvo cabida para interpretaciones musicales en el marco del Castillo de San Cristóbal del casco histórico del Viejo San Juan.
“El huracán María fue un golpe que nos ha marcado para siempre”, destacó el gobernador, acompañado por la primera dama de Puerto Rico, Beatriz Rosselló, y los dos hijos pequeños de la pareja.
Cientos de invitados, la mayoría vestidos de blanco, escucharon durante cerca de una hora y media las palabras de las personalidades que participaron en el acto, que contó con la presencia del secretario del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos (HUD, en inglés), Ben Carson, y el gobernador de Florida, Richard Scott, entre otros.
“Es un momento de emociones encontradas”, señaló con tono grave Rosselló, para quien hoy en el acto “A un año del paso del Huracán María” quedó reflejada la solidaridad de todo Puerto Rico con las familias de los fallecidos.
“El mejor homenaje -para los fallecidos- es construir un mejor Puerto Rico para sus hijos y nietos”, dijo el gobernador, que como aseguró no había vivido nunca experiencias tan desgarradoras como las que experimentó en los días que siguieron al 20 de septiembre de 2017.
Rosselló destacó que aquella experiencia sirvió para “sacar a flote la perseverancia de los puertorriqueños» “Podemos juntos convertir un mejor Puerto Rico”, dijo el gobernador, tras aclarar que se asegurará de que todos los recursos disponibles se destinen a ese objetivo.
Rosselló pidió también que los puertorriqueños reciban un trato justo “en igualdad de condiciones como ciudadanos norteamericanos».
El jefe del Ejecutivo destacó que las murallas del Castillo de San Cristóbal donde se celebró el acto ejemplifican “la perseverancia y resistencia” del pueblo puertorriqueño.
El acto estuvo alternado por intervenciones de personalidades y actuaciones musicales, como la que dio comienzo al avento con las interpretaciones de José Juan Carrión de los himnos de Puerto Rico y Estados Unidos.
La representante de Puerto Rico ante el Congreso en Washington, Jenniffer González, subrayó durante su intervención que el acto de hoy recuerda “la fuerza de los puertorriqueños para ponerse de pie».
“Un año después nos hemos crecido como pueblo”, aseguró González, después de agradecer la ayuda prestada por el Gobierno federal. González resalto que Washington asignó para ayudas a Puerto Rico por el huracán María 44.000 millones de dólares, la cantidad más alta de la historia destinada para paliar los daños ocasionados por un desastre natural, aunque reconoció que se necesita mucho más.
Las palabras González fueron seguidas por discursos de un rabino y un imán en representación de las comunidades judía y musulmana en Puerto Rico. Monseñor Wilfredo Peña, de la Parroquia Santa Bernardita en San Juan, también participó con palabras de recuerdo para los fallecidos.
También intervino un representante de los mormones y la pastora Wanda Rolón, que aseguró que el huracán mostró la fuerza del pueblo puertorriqueño. El cantante de música cristiana Samuel Hernández también interpretó una canción que alegró a las cientos de personas congregadas en el histórico edificio.
