Hay una cierta obsesión en nuestra cultura occidental por establecer cuándo se acabará el mundo. ¿Podemos establecer cuándo la especie humana desaparecerá? Muchos grupos cristianos fundamentalistas centran su prédica en calcular el fin de los tiempos usando citas biblicas del último libro de la Biblia.
El Apocalipsis o Revelación, por su lenguaje simbólico, se presta para todo tipo de especulaciones, desde la falsa predicción de grandes guerras, el mito del “rapto” y cuestiones semejantes.
La sabiduría popular acuñó la expresión muy sabia de que el mundo se acaba para cada cual que muere.
Para mi generación en los años 60, 70 y 80 del siglo pasado el final vendría de un holocausto nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética, hoy tememos que la destrucción del balance ecológico conduzca a la extinción de nuestra especie y las demás que habitan en nuestro planeta.
Existen otros finales. Si somos consistentes con la evolución de la especies los seres humanos cambiaremos a lo largo de milenios convirtiéndonos en otra especie tan diferente como lo fueron nuestros ancestros hace un millón de años a como somos hoy día.
Pero exista lo que exista, dentro unos mil millones de años el Sol iniciará un lento proceso de muerte que hará imposible la vida en este planeta.
Pero si eso no pasa, es seguro que la colisión de la Galaxia Andrómeda con la Vía Láctea en unos 3 mil millones de años afectará mortalmente nuestro sistema solar. La tierra seguro se destruirá y los humanos desapareceremos.