El Estado innovador

El Estado innovador

El Estado innovador

José Armando Tavárez

La innovación debería estar en el código genético de la admiración pública en el siglo XXI. Según el Manual de Oslo, la innovación se entiende como “la concepción e implantación de cambios significativos en el producto, el proceso, el marketing o la organización de la institución con el propósito de mejorar los resultados”.

Dichos cambios innovadores se realizan mediante “la aplicación de nuevos conocimientos y tecnología”. Por tanto, la tecnología juega un rol muy importante a la hora de aplicar innovación en la administración pública dominicana.

Lamentablemente, la administración pública se ha considerado burocrática e ineficiente. Los ciudadanos perciben que algunos procesos de servicio público tardan mucho y resultan costosos.

Esa es la razón por la cual el concepto de innovación se percibe ajeno a la realidad de la gestión pública. Esto, lejos de ser un obstáculo imposible de superar, debe de convertirse en una oportunidad o desafío que debemos de aprovechar o superar.

La meta debe ser construir un estado innovador, donde se aplique la innovación en la gestión de lo público, tomando como marco de referencia la era digital en la que nos encontramos y la progresiva transformación de todos los aspectos de la vida humana.

En la administración pública, a través de la cual los gobiernos gestionan los asuntos relativos al bien común, es importante que podamos reconocer el gran valor que tienen las herramientas tecnológicas para proveer al ciudadano un servicio público de calidad. Sin la tecnología, no podríamos tener facilidades administrativas en tiempo oportuno, de una forma adecuada y con alto estándar de calidad.

La administración pública dominicana, desde hace veinte años, ha implementado diferentes agendas y proyectos de gobierno electrónico o digital. Se ha pretendido que mediante un uso intensivo de las herramientas tecnológicas se pueda diseñar e implementar servicios públicos más eficientes.

Es una ruta de transformación que no podemos detener. Con la nueva agenda digital, esperamos más y mejores avances en la materia. Construyamos juntos una verdadera nación digital.



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