El portavoz en lengua árabe de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) publicó en la mañana de este sábado un mensaje en redes sociales en el que advirtió a los habitantes de la zona «D5» del norte de Gaza que se desplazaran hacia el sur.
La zona «D5» corresponde a una casilla dentro de la cuadrícula superpuesta sobre los mapas de las FDI.
Se trata, para ellos, de un bloque que se divide en varias decenas de áreas más pequeñas.
Este mensaje, el último de una serie, decía: «Las FDI están operando con gran fuerza contra las organizaciones terroristas y seguirán haciéndolo por más tiempo. La zona designada, incluidos los refugios ubicados allí, se considera una zona de combate peligrosa. La zona debe ser evacuada inmediatamente por la carretera de Saladino hacia la zona humanitaria».
Adjunto al mensaje incluyó un mapa con una gran flecha amarilla que señala desde el bloque D5 hacia el sur de Gaza.
El mensaje no promete un rápido retorno a los lugares en los que la gente ha estado viviendo, una zona que ha sido pulverizada durante un año de repetidos ataques israelíes.
El núcleo del mensaje es que las FDI utilizarán «una gran fuerza (…) durante mucho tiempo».
En otras palabras, no esperen regresar pronto.
La zona humanitaria designada por Israel en el mensaje es Al Mawasi, que antes era una zona agrícola en la costa cerca de Rafah (frontera sur de Gaza con Egipto).
Está superpoblada y no es más segura que muchas otras partes de Gaza.
BBC Verify ha rastreado al menos 18 ataques aéreos en la zona.
Hamás ha enviado sus propios mensajes a las 400.000 personas que quedan en el norte de Gaza, una zona que antes era el corazón urbano de la Franja con una población de 1,4 millones de habitantes.
Hamás les dice que no se muden. El sur, aseguran, es igual de peligroso.
Además de eso, Hamás les advierte que no se les permitirá regresar.
A pesar de los ataque aéreos y los bombardeos de artillería israelíes, parece que mucha gente no se mueve de su lugar.
Cuando bajé a una zona con vistas al norte de Gaza, pude oír explosiones y vi columnas de humo que se elevaban.
La intensidad me recordó los primeros meses de la guerra.
Algunas de las personas que se han quedado en el norte de Gaza cuando tantas otras ya huyeron hacia el sur lo hacen para permanecer con familiares vulnerables.
Otros pertenecen a familias vinculadas a Hamás.
Según las leyes de la guerra, eso no los convierte automáticamente en beligerantes.
Una táctica que han utilizado durante el último año los civiles que quieren evitar las operaciones de las FDI sin correr el riesgo de encontrarse en el superpoblado y peligroso sur de Gaza es trasladarse a otros lugares del norte -por ejemplo de Beit Hanún a la ciudad de Gaza-, mientras las FDI operan cerca de sus casas o refugios.
Cuando el ejército se marcha, ellos regresan.
Según colegas de la BBC que están en contacto diario con los palestinos de Gaza, las FDI están tratando de impedir que eso ocurra.
Están canalizando a las familias que se desplazan en una sola dirección, por Saladino.
«¿A dónde vamos?»
Israel no permite a los periodistas entrar a Gaza para informar sobre la guerra, salvo en el caso de viajes breves, poco frecuentes y muy supervisados con militares.
El Comité para la Protección de los Periodistas afirma que al menos 128 trabajadores de medios palestinos murieron en Gaza desde que comenzó la guerra.
Aquellos periodistas palestinos que ya se encontraban en la Franja el 7 de octubre siguen realizando un valiente trabajo.
En el norte de Gaza, desde que Israel volvió a la ofensiva, filman a familias presas del pánico mientras huyen, a menudo con niños pequeños que les ayudan cargando mochilas de gran tamaño.
Uno de ellos envió una breve entrevista con una mujer llamada Manar al Bayar que corría por la calle con un niño en brazos.
Mientras caminaba apresurada, medio corriendo, al salir del campo de refugiados de Jabalia, relataba: «Nos dijeron que teníamos cinco minutos para salir de la escuela de Faluya. ¿A dónde vamos? En el sur de Gaza hay asesinatos. En el oeste de Gaza están bombardeando a la gente. ¿A dónde vamos, oh Dios? Dios es nuestra única chance».
El viaje es duro. A veces, dicen los gazatíes, las FDI disparan contra quienes se desplazan.
Las FDI, por su parte, insisten en que sus soldados cumplen con unas estrictas normas de combate que respetan el derecho internacional humanitario.
Pero la jefa de protección de la ONG británica Ayuda Médica para los Palestinos, Liz Allcock, sostiene que la evidencia presentada por civiles heridos sugiere que fueron atacados.
«Cuando recibimos pacientes en los hospitales, vemos un gran número de mujeres, niños y personas de, si se quiere decir así, edad no combatiente, que tienen disparos directos a la cabeza, a la columna vertebral, a las extremidades, lo cual es muy indicativo de un ataque directo dirigido«, señaló.
Una vez más, la ONU y las agencias de ayuda que trabajan en Gaza afirman que la presión militar israelí está profundizando lo que ya es una catástrofe humanitaria.
Desde los hospitales que quedan en el norte de Gaza se transmiten mensajes desesperados en los que dicen estarse quedando sin combustible para alimentar los generadores que mantienen en funcionamiento los hospitales y con vida a los pacientes gravemente heridos.
Algunos hospitales informan que sus edificios fueron atacados por Israel.
El «Plan de los Generales»
La sospecha entre los palestinos, la ONU y los organismos de ayuda es que las FDI están adoptando gradualmente una nueva táctica, o parte de ella, para despejar el norte de Gaza.
Es lo que se conoce el «Plan de los Generales».
Fue propuesto por un grupo de oficiales de alto rango retirados, dirigidos por el mayor general (retirado) Giora Eiland, exasesor de seguridad nacional.
Como la mayoría de los israelíes, estos militares retirados están frustrados y enojados porque pasó un año del inicio de la guerra y su país aún no logró los objetivos de destruir a Hamás y liberar a todos los rehenes.
El «Plan de los Generales» es una idea nueva que, según creen sus impulsores, puede, desde la perspectiva de Israel, romper el punto muerto.
En su núcleo está la idea de que Israel puede obligar a Hamás y a su líder, Yahya Sinwar, a rendirse si aumenta la presión sobre toda la población del norte.
El primer paso es ordenar a los civiles que salgan por los corredores de evacuación que los lleven al sur de Wadi Gaza, un arroyo que va de este a oeste y que se ha convertido en una línea divisoria en Gaza desde la invasión israelí del pasado octubre.
Eiland cree que Israel debería haber llegado a un acuerdo de inmediato para recuperar a los rehenes, incluso si eso significaba retirarse por completo de Gaza.
Un año después son necesarios otros medios, alega.
En su oficina en el centro de Israel expuso el núcleo del plan.
«Dado que ya hemos rodeado la parte norte de Gaza en los últimos nueve o diez meses, lo que deberíamos hacer es lo siguiente: decir a los 300.000 residentes [que la ONU estima en 400.000] que aún viven en la parte norte de Gaza que tienen que abandonar esta zona y darles 10 días para salir a través de corredores seguros que Israel proporcionará», indicó.
«Y después de ese tiempo, toda esta área se convertirá en una zona militar. Y todos los miembros de Hamás, ya sean combatientes o civiles, seguirán teniendo dos opciones: rendirse o morir de hambre«, continuó diciendo.
Eiland quiere que Israel selle las zonas una vez que se cierren los corredores de evacuación.
Cualquiera que quede atrás será tratado como un combatiente enemigo.
La zona estaría sitiada y el ejército bloquearía el ingreso de todos los suministros de alimentos, agua y otros elementos necesarios para la vida.
Este mayor general retirado cree que la presión se volvería insoportable y lo que queda de Hamás se desmoronaría rápidamente, con lo que se podría liberar a los rehenes sobrevivientes y darle a Israel la victoria que anhela.
El Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas afirma que la actual ofensiva en Gaza está teniendo un «impacto desastroso en la seguridad alimentaria de miles de familias palestinas».
Los principales cruces hacia el norte de Gaza, dice, fueron cerrados y no ha entrado ninguna ayuda alimentaria en la Franja desde el 1 de octubre.
Las cocinas móviles y las panaderías se vieron obligadas a suspender su actividad debido a los ataques aéreos.
La única panadería que funciona en el norte, que recibe apoyo de este programa, se incendió al ser alcanzada por munición explosiva.
La situación en el sur es casi igual de grave.
No está claro si las FDI adoptaron el «Plan de los Generales» en parte o en su totalidad, pero la evidencia circunstancial de lo que se está haciendo en Gaza sugiere que es, como mínimo, una fuerte influencia en las tácticas que se están utilizando contra la población.
La BBC envió una lista de preguntas a las FDI, pero no recibió respuesta.
Los ultranacionalistas del gabinete de Benjamin Netanyahu quieren reemplazar a los palestinos del norte de Gaza por colonos judíos.
«Nuestros heroicos combatientes y soldados están destruyendo el mal de Hamás y ocuparemos la Franja de Gaza (…) A decir verdad, donde no hay asentamientos, no hay seguridad», dijo el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, entre sus numerosas declaraciones sobre el tema.