El Congreso y el Código Penal

El Congreso y el Código Penal

El Congreso y el Código Penal

Franklin Puello

Ya fue conformada la comisión bicameral que estudiará el proyecto de modificación del Código Penal.
El compromiso asumido por los diputados y senadores debe ser cumplido de acuerdo a las expectativas del país y nunca ajustado a complacer intereses de ningún sector, no importa la influencia que ejerza.

El péndulo del debate se mueve en torno a los promotores de la despenalización del aborto para permitir la interrupción del embarazo cuando haya incesto o violación sexual, malformación del feto y peligre la vida de la mujer. También hay los defensores de la preservación de la vida de la mujer y de su hijo, tras la visión de que hay derecho a la vida desde la misma concepción.

Sin embargo, hay congresistas y otros sectores que simpatizan con la ola global para que el aborto sea una realidad sin importar los valores cristianos que caracterizan al pueblo dominicano.

Nuestro marco legal, que es la Constitución de la República, obliga a preservar la vida desde la concepción hasta la muerte, por lo que es un elemento jurídico que habrá que preservarse en medio de la discusión y posible aprobación del Código Penal.

De ahí que hay legisladores que han propuesto que se discuta y se promueva una ley especial que regule lo relativo al aborto y las causales del incesto y violación sexual, la malformación del feto y cuando peligre la vida de la madre.

Lo prudente es que el Congreso Nacional, representado en la comisión bicameral integrada por el Senado y la Cámara de Diputados, consulte a especialistas capacitados y que no traten de imponer patrones foráneos que pisotean las creencias religiosas y desconocen nuestro marco jurídico sobre este tema.

Lo real es que el país se merece la aprobación del Código Penal que establece sanciones en diferentes delitos y su puesta en ejecución no puede estar supeditada a las presiones a favor y en contra que han desatado los temas del aborto y de las tres causales.

En medio de los debates que hubo cuando la Cámara de Diputados tenía el Código bajo estudio, que posteriormente fue aprobado y enviado al Senado, se tuvo que aclarar la gravedad de la pena contra la corrupción.

“En el tema de la corrupción, el que cometa un ilícito penal va a tener en el menor de los casos 21 años de prisión, en el mayor de los casos va a estar entre 53 a 60 años, porque hay cúmulo de penas, son infracciones reales y dentro de ese capítulo, para haber corrupción tiene que haber la concusión y cuando se da concusión se da malversación de fondos, enriquecimiento ilícito y el cohecho activo”, explicó Alexis Jiménez, presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados.

Pero también hay sanciones severas en caso de robo. Así lo explicó también Jiménez en su oportunidad: “En el caso del robo, el primero es el robo normal, el segundo es el robo agravado, el tercero es el robo con violencia y asesinato y eso es así, eso pasa en todos los artículos del Código”.

Sin embargo, los temas del aborto y de las tres causales eclipsaron muchos de los aspectos, como la persecución de la corrupción y el aborto, se contemplan el Código, ya que fue puesta en marcha una lucha mediática e ideológica sobre estos temas.

Hay que esperar la efectividad del trabajo de esa comisión bicameral sobre el proyecto de modificación del Código Penal.