Bogotá.- El ansiado cese el fuego bilateral entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) arrancó a las cero horas de ayer con gran expectativa y esperanza en el país, ya que se trata del más largo pactado con la guerrilla, con una duración de 180 días, y será verificado por la ONU.
Desde que se firmó el acuerdo, el pasado 9 de junio en La Habana, hasta la fecha ha habido muchas especulaciones y polémicas sobre cómo funcionará esta medida destinada a reducir el conflicto y crear condiciones para avanzar hacia un acuerdo de paz.
Por el momento no hay una lista de acciones concretas permitidas o prohibidas, sino que ambas partes se comprometen a “no realizar acciones prohibidas en el Derecho Internacional Humanitario (DIH)”, el reglamento internacional que fija las reglas de la guerra.
El camino hasta este punto no ha sido fácil pues desde que arrancaron los diálogos de paz, en noviembre del año pasado, estuvo entre las prioridades de ambas delegaciones.
Rondas de diálogo
Luego de tres rondas de conversaciones, en Venezuela, México y Cuba, se logró un acuerdo final para el cese el fuego bilateral, que estará vigente hasta el 29 de enero de 2024.