París.- El joven detenido como autor del atentado terrorista de este viernes en París que dejó heridos de gravedad a dos periodistas ha asumido su ataque ante los investigadores que lo interrogan y ha explicado que su acción era contra la revista satírica “Charlie Hebdo».
Fuentes de la investigación citadas por los medios, indican este sábado que este paquistaní que dice tener 18 años ha reconocido ser quien hirió de gravedad con un arma blanca a un hombre y a una mujer que trabajan en el edificio de la calle Nicolas Appert donde estuvo la redacción de “Charlie Hebdo” cuando habían salido a la calle a fumar.
El atacante ha dado a su acción una dimensión política. Ha contado que su intención era atentar contra la revista por haber vuelto a publicar las caricaturas satíricas del profeta Mahoma.
Esas caricaturas estuvieron en el origen del atentado yihadista contra la redacción de “Charlie Hebdo” de enero de 2015, en el que doce personas fueron asesinadas, según los dos terroristas, los hermanos Chérif y Said Kouachi, abatidos días después por las fuerzas del orden francesas durante su persecución.
Tras la masacre, la sede de la revista se trasladó por razones de seguridad de esa dirección, donde están las oficinas de la sociedad de producción Premières Lignes en la que trabajan las dos víctimas de la agresión de ayer.
Horas después del ataque del viernes, “Charlie Hebdo” manifestó “su apoyo y su solidaridad” con esos dos periodistas heridos y con Premières Lignes, empresa con la que fueron vecinos hasta 2015 en el edificio del número 10 de la calle Nicolas Appert.
La revista también hizo notar que “este episodio trágico demuestra una vez más que el fanatismo, la intolerancia (…) siguen estando tan presentes en la sociedad francesa. Esos hechos, lejos de aterrorizarnos, deben hacernos todavía más combativos en la defensa de nuestros valores».
La agresión de este viernes se produce mientras se desarrolla en el Tribunal de París el juicio por el ataque de 2015 contra el semanario satírico.
Además del autor confeso, están bajo arresto otros seis hombres, también paquistaníes, para esclarecer si fueron cómplices o pudieron estar implicados de alguna forma.
Cinco de ellos compartían con él últimamente una vivienda en la ciudad de Pantin, limítrofe con París. El sexto también había vivido con él en una residencia social de Cergy, otra ciudad de la región.