Wells Fargo, que tiene sede en San Francisco, atiende a clientes institucionales y corporativos en la región de Europa, Medio Oriente y África y planea incrementar sus actividades de finanzas inmobiliarias y banca en Londres a pesar del voto a favor del Brexit, según Pizzo.
La compañía también tiene un banco en Irlanda que conservaría sus derechos de pasaporte independientemente del Brexit, así como oficinas en Luxemburgo y Milán.
El banco suizo UBS podría retirar algunas operaciones del Reino Unido.