Según publicó un reciente estudio, el horario en que las personas realizan actividad física influiría en los beneficios para la salud. Este síndrome aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular y diabetes tipo.
SANTO DOMINGO.-Basta que le falte a alguien siquiera por un minuto o esté contaminado para valorarlo, más aún en tiempos del COVID-19, cuando se aprecia la necesidad de percibirlo en su condición de pureza para garantizar la salud.
El aire, ese recurso natural renovable, una mezcla de gases que constituye la atmósfera terrestre cuya composición está conformada por nitrógeno al 78 por ciento, oxígeno al 21%, Argón 0.96%, dióxido de carbono 0.04%, vapor de agua y trazas de otros elementos, avala la vida de los seres vivos.
De ahí que José Andrés Rodríguez, encargado del Departamento la Calidad del Aire del Viceministerio de Gestión Ambiental de Medio Ambiente, cita parte de los beneficios del aire puro. “Ayuda a bajar tensión y estrés al realizar una respiración más tranquila y profunda generando una sensación de bienestar; el tomar al menos media hora diaria de aire puro en parques o el campo, reduce los trastornos cardíacos y los cuadros depresivos”.
De acuerdo con José Andrés Rodríguez, el aire puro genera una sensación de revitalización que devuelve la energía física y salud mental, al reducir los niveles de dióxido de carbono en la sangre, ayuda a estimular el sistema inmunológico, reduciendo la posibilidad de padecer trastornos alérgicos, afecciones respiratorias y asma.
Eliminar toxinas
“Cuando se respira aire limpio se eliminan las toxinas acumuladas y células muertas diariamente en el organismo dadas las funciones vitales de estos, ayudándonos a la recuperación más rápida de las enfermedades gracias a la oxigenación celular, a la vez que evita muchos contagios producidos al respirar en ambientes cerrados contaminados con virus, aparte se servir de antioxidantes actuando como el colágeno y la elastina entre otros, retrasando así el envejecimiento celular, y el deterioro del aspecto estético”, detallo.
Recomendaciones
El especialista recomienda, muy especialmente en estos tiempos, procurar espacios interiores con una ventilación constante y evitar lugares cerrados que no permiten su renovación.
“En sitios donde existen salidas de humos y en lugares donde se concentra mayor cantidad de personas hay que mantener una corriente continua para conseguir renovar el ambiente con aire limpio”, sostiene el experto.
Por igual sugiere no tener plantas en los dormitorios, ya que son seres vivos que consumen el oxígeno del aire y sus funciones vitales son el expulsar dióxido de carbón, nocivo para la calidad del aire.
Exhorta evitar el uso de productos en formato de aerosoles, como pintura, lacas para el pelo, insecticidas, ambientadores, ceras para muebles y otros tipos de limpiadores y buscar otras alternativas, porque parte de las partículas pulverizadas se quedan en suspenso, introduciéndose en el organismo.
Ejercitarse
Practicar ejercicios aeróbico al menos media hora al día resulta muy útil siempre que se haga en entorno con aire puro, porque la combinación de ambos factores retrasa el envejecimiento por muerte celular y permite una mejor ventilación.
Rodríguez insta utilizar mascarilla para salir a la calle, en especial cuando se anuncian altos niveles de contaminación.
Realidad
—Aportes
El aire proporciona, en forma de vapor de agua, dióxido de carbono, nitrógeno y oxígeno, parte de la materia prima con la que se constituyen los seres vivos.