Santo Domingo.- Hoy 22 de marzo es el Día Mundial del Agua, declarado por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en 1993, con el objetivo de destacar la función esencial del preciado líquido y propiciar mejoras para la población mundial que sufre de problemas relacionados con la carencia de agua.
La creación de un día internacional dedicado al agua fue recomendado durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y Desarrollo(CNUMAD), en 1992 en Río de Janeiro.
Esta fecha es una oportunidad de aprender más sobre temas relacionados con el agua, sirve de inspiración para compartir los problemas relacionados con esta y tomar medidas para cambiar la situación.
Desde su aprobación, ONU destina cada año a focalizar un tema relacionado: para este 2016, y en vinculación con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se pone énfasis en ‘Agua y trabajo’, haciendo referencia a cómo tanto el agua como el trabajo tienen la capacidad de transformar la vida de las personas: el agua es esencial para la supervivencia y el medio ambiente; y la economía y el trabajo de calidad proporcionan ingreso y allanan el camino hacia los avances económicos y sociales.
1.500 millones de personas trabajan vinculados al agua
Según ONU, la mitad de los trabajadores del mundo –unos 1500 millones de personas- trabajan en sectores relacionados con el agua, y casi todos los puestos de trabajo, con independencia del sector, dependen directamente de esta. “Sin embargo, a pesar del vínculo indisoluble entre el trabajo y el agua, millones de personas cuyas vidas dependen del líquido elemento a menudo no son reconocidos o protegidos por los derechos laborales básicos”, añade la organización.
Desarrollo sostenible
El agua es un elemento esencial del desarrollo sostenible. Los recursos hídricos, y la gama de servicios que prestan, juegan un papel clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental. El agua propicia el bienestar de la población y el crecimiento inclusivo, y tiene un impacto positivo en la vida de miles de millones de personas, al incidir en cuestiones que afectan a la seguridad alimentaria y energética, la salud humana y al medio ambiente.