Efectos secundarios del COVID

Efectos secundarios del COVID

Efectos secundarios del COVID

Claudio Caamaño Vélez

Si estás leyendo esto es porque sabes leer, y aunque no lo creas es un privilegio. Y claro, aún mayor privilegio es tener la disponibilidad del tiempo para sentarte a leerlo, pues muchas personas están tan afanadas en buscar el pan que no tienen cinco minutos para eso. Más aún si lo estás leyendo en un smartphone.

Tanto tú que lees este escrito, como yo que lo escribí, somos, aunque no nos parezca, personas privilegiadas en medio de una sociedad con tantas precariedades.
Sé que también tenemos necesidades, y nos gustaría estar mejor.

Es bueno que siempre busquemos superarnos. Pero hay millones que están peor.

Si en tiempos normales tenemos muchas carencias, solo hay que imaginarse lo mal que andamos en medio de una pandemia, no sólo sanitaria, también económica.
Cuanta gente ha perdido su trabajo.

La mayoría ganaba salarios que apenas les daba para comer malamente, y qué decir de ahorrar. De esas, muchas viven (si no es que ya los han sacado) en casas alquiladas, llenas de niños que ahora no reciben desayuno escolar. Sin Internet, ni telecable para distraerse del encierro.

Hambre, aburrimiento, hacinamiento y desesperanza es lo único que sobra en gran parte de los hogares dominicanos.
Esto está generando una ola de ansiedad, depresión e incertidumbre con dimensiones y consecuencias incalculables.

Grandes retos nos esperan como nación. Que esta amarga etapa nos ayude a fortalecer los valores de la solidaridad, la compasión y el agradecimiento.
Una cosa podemos estar seguros: saldremos adelante, y aunque nos tome tiempo recuperarnos, saldremos fortalecidos.