SEÚL.— Apenas unas horas después de que Corea del Norte realizara un despliegue de poderío militar, la rival Corea del Sur anunció el miércoles que instaló los componentes clave de un polémico sistema antimisiles de Estados Unidos destinado a contrarrestar cualquier amenaza norcoreana.
El anuncio surcoreano sobre los avances para el establecimiento del llamado Sistema Terminal de Defensa Aérea a Gran Altitud (THAAD por sus iniciales en inglés) se produjo mientras buques militares de Estados Unidos fuertemente equipados convergen a las aguas de la Península Coreana y una combativa Corea del Norte da indicios de posibles ensayos nucleares y de misiles.
A través de un comunicado, Corea del Sur informó el miércoles que se desplegaron partes no especificadas del THAAD.
El documento indica que Seúl y Washington han presionado para que el THAAD entre en funcionamiento lo más pronto posible y pueda lidiar con la creciente amenaza nuclear y de misiles de Corea del Norte.
Se instalaron seis lanzadores, algunos misiles de intercepción y al menos un radar, reportó la agencia noticiosa surcoreana Yonhap.
Las labores para terminar este mismo año con la instalación del sistema ha provocado molestias en Corea del Norte, China y Rusia, que ven como una amenaza de seguridad al sistema que utiliza potentes radares. El martes, Corea del Norte realizó ejercicios de artillería, mientras que un submarino estadounidense equipado con misiles guiados llegó a Corea del Sur.
En tanto, la Casa Blanca alista un informe extraordinario a los senadores sobre la creciente amenaza nuclear.
Los temores de que Corea del Norte celebraría el 85to aniversario de la fundación de su ejército con una prueba nuclear o el lanzamiento de un misil balístico, resultaron infundados, pero los ejercicios fungieron como recordatorio de la amenaza que representa detrás de la frontera con Corea del Sur, un aliado estadounidense.
La zona de ejercicios militares en la ciudad de Wonsan, en la costa este, involucró entre 300 y 400 piezas de artillería, reportó Yonhap.
Un funcionario del ministerio de Defensa de Seúl no pudo confirmar los detalles. La prensa oficial de Corea del Norte reportó la mañana del miércoles que el líder Kim Jong Un observó en persona los ejercicios militares, entre los que se reporta se incluyeron ataques con torpedos de submarino hacia falsos buques enemigos “mientras que los aviones de combate y bombarderos volaron a nivel de mar para arrojar bombas a sus objetivos”, destacó la Agencia de Noticias Korean Central.
El presidente Donald Trump ha enviado más recursos militares a la región para mostrar su poderío, a la vez que depende de China para ejercer una presión económica en su aliado.
El presidente de China, Xi Jinping, quien habló el lunes con Trump, exhortó tanto a Pyongyang como a Washington a que muestren prudencia. En Washington, altos funcionarios del gobierno de Trump darán el miércoles un informe al pleno del Senado.
El acelerado paso de las pruebas de armas por parte de Corea del Norte en el último año, ha llevado a la autoritaria nación de Kim Jong Un a estar cerca de desarrollar un misil con capacidad nuclear que pueda llegar a Estados Unidos continental.
El senador republicano Lindsey Graham expresó el martes su optimismo de que Trump no permitirá que Corea del Norte llegue a ese punto. Graham, experto en defensa, cenó con Trump la noche del lunes y dijo que Corea del Norte no debe subestimar la determinación del presidente.
“Posiblemente estamos en una de las situaciones más desafiantes desde la crisis de los misiles cubanos”, dijo el senador John McCain, otro republicano que cenó con Trump.