Estados Unidos derribó otro objeto volador no identificado, esta vez sobre el lago Huron, cerca de la frontera con Canadá.

Fue derribado por pilotos de la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional el domingo, dijo la congresista de Michigan Elissa Slotkin.

«Gran trabajo de todos los que llevaron a cabo esta misión», afirmó.

Se trata del cuarto incidente de este tipo durante el mes de febrero.

Washington ha estado en alerta máxima desde que su Ejército destruyó un presunto globo espía chino el 4 de febrero.

El incidente del domingo es la tercera vez este año que un objeto de gran altitud no identificado ha sido derribado por aviones de combate estadounidenses.

El presidente estadounidense, Joe Biden, ordenó el viernes que se derribara un objeto sobre Alaska. Y el sábado, otro fue derribado sobre el Yukón, en el noroeste de Canadá.

Tanto Estados Unidos como Canadá están trabajando para recuperar los restos de los artefactos. Sin embargo, la búsqueda en Alaska se ha visto obstaculizada por las condiciones del Ártico.

Investigación en progreso

«Estos objetos no se parecían mucho y eran mucho más pequeños que el globo [del 4 de febrero] y no los caracterizaremos definitivamente hasta que podamos recuperar los escombros», señaló un portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.

Se sabe poco sobre el objeto que fue derribado el domingo, y las autoridades aún no han dado detalles sobre su tamaño o apariencia.

Sin embargo, más temprano el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, dijo que los funcionarios de inteligencia creían que los artefactos derribados el viernes y el sábado eran globos de vigilancia.

«Creen que eran [globos], sí», declaró a la cadena ABC News, y agregó que eran «mucho más pequeños» que el primero derribado en la costa de Carolina del Sur.

«La conclusión es que hasta hace unos meses no sabíamos de estos globos«, dijo.

«Probablemente podremos armar este globo de vigilancia y saber exactamente qué está pasando», añadió Schumer.

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