MINNEAPOLIS.— Enfermos recientes de coronavirus en Estados Unidos dicen que festejaron el Día de Acción de Gracias con personas por fuera de sus familias a pesar de las enfáticas advertencias de las autoridades de salud pública de permanecer en casa y mantener la distancia.
Es lo que dicen los enfermos en todo el país a los rastreadores de contactos y los médicos de emergencias. El virus ya se propagaba por todo el país antes de Acción de Gracias, pero la curva mostraba señales de aplanamiento. Desde entonces ha vuelto a surgir con mucho más de 200.000 casos diarios al viernes último.
Es un 16% de aumento con respecto a las vísperas de Acción de Gracias, según un análisis de Associated Press.
El promedio diario de 2.260 muertes en un período de siete días es casi el mismo de mediados de abril. Éstas son las perspectivas sombrías para Estados Unidos cuando está por comenzar la campaña de vacunación contra el COVID-19, ahora que la Administración de Alimentos y Medicamentos ha autorizado la aplicación de la vacuna Pfizer.
Estados Unidos registra 15,8 millones de casos y más de 295.000 muertes desde el inicio de la pandemia.
