La Guardia Costera de Estados Unidos incautó un buque petrolero frente a las costas de Venezuela, informó este miércoles Donald Trump.
"Acabamos de incautar un petrolero frente a la costa de Venezuela, un petrolero grande, muy grande; de hecho, el más grande que se haya incautado jamás", declaró el presidente estadounidense frente a la prensa en el Despacho Oval de la Casa Blanca.
El anuncio, que provocó un moderado repunte de los precios internacionales del crudo, supone una nueva escalada en la tensión de la relación entre Washington y Caracas.
Las autoridades estadounidenses no han revelado por el momento el nombre del buque interceptado, la bandera bajo la que navegaba o el punto exacto en el que se produjo la incautación.
La BBC ha solicitado comentarios al gobierno venezolano, pero aún no ha recibido respuesta.
Estados Unidos ha intensificado su despliegue militar frente a las costas de Venezuela en las últimas semanas, alegando que su objetivo es combatir el narcotráfico, mientras el gobierno de Caracas acusa a Washington de querer de derrocar al gobierno de Maduro y apoderarse de las reservas petroleras venezolanas.
Trump ordenó un amplio despliegue militar en la región con un portaaviones, cazas y decenas de miles de tropas
El presidente estadounidense también ha insinuado en repetidas ocasiones la posibilidad de una intervención militar directa en Venezuela.
Un golpe para Caracas
Expertos consideran que la incautación del buque podría complicar seriamente la capacidad de Venezuela para exportar su petróleo, ya que podría disuadir a compañías de transportar cargamentos venezolanos por el riesgo de sanciones.
El crudo constituye la principal fuente de ingresos del país, que se ha visto obligado a venderlo con importantes descuentos por la competencia de petróleo sancionado procedente de Rusia e Irán.
La mayor parte del petróleo venezolano se dirige a China, por lo general a través de intermediarios.
Venezuela exportó más de 900.000 barriles diarios de petróleo el mes pasado, el tercer mayor promedio mensual del año, según datos recogidos por la agencia Reuters.
El gobierno estadounidense aplica sanciones al petróleo venezolano, con la excepción de ciertas compañías que están exentas.
Chevron posee una licencia que le permite operar en Venezuela.
La multinacional estadounidense, que extrae petróleo en varias regiones del país sudamericano, paga al gobierno de Nicolás Maduro con parte del crudo que produce en colaboración con la empresa petrolera estatal PDVSA, a través de empresas conjuntas.
EE.UU. aumenta la presión
La administración Trump ha incrementado sus acciones contra Caracas en las últimas semanas, alegando que el gobierno de Maduro está vinculado a operaciones de narcotráfico.
El Pentágono ha llevado a cabo más de 20 ataques contra supuestas embarcaciones dedicadas al tráfico de drogas en aguas cercanas a Venezuela y Colombia, que habrían causado la muerte de más de 80 personas.
Por su parte, Maduro ha denunciado que el despliegue militar estadounidense busca derrocarlo y apoderarse de las reservas petroleras venezolanas, que están entre las mayores del mundo.
El presidente venezolano llamó a la población a unirse contra las amenazas de Estados Unidos y ordenó el despliegue de tropas, barcos, aeronaves y drones en la frontera con Colombia y en zonas costeras.
La incautación del petrolero se conoció el mismo día en que la líder opositora venezolana María Corina Machado debía recoger en Noruega el Premio Nobel de la Paz.
Al final fue su hija quien recibió el galardón en nombre de su madre, aunque se informó que Machado abandonó Venezuela y se encuentra viajando hacia Oslo.