José Armando Tavárez
Hace unas semanas tuve el privilegio de visitar el Centro Futuro, un nuevo proyecto de la Alcaldía del Distrito Nacional.
Se me informó que desde dicha institución se ofrecerán programas gratuitos diseñados para impulsar el desarrollo profesional y técnico de los jóvenes, en colaboración con Instituto de Formación Técnico Profesional (Infotep), Fundación Altice y otras organizaciones que se seguirán sumando a tan noble proyecto.
Con el recorrido que hice acompañado de la alcaldesa del Distrito Nacional, la Sra. Carolina Mejía, quedé gratamente impresionado como persona que ayudé a transformar la vida de miles de otras personas mediante la educación tecnológica. Sabía que desde hace unos años se estaba conceptualizando dicho proyecto, pero verlo ejecutado debe ser motivo de alegría para todos los munícipes del Distrito Nacional.
Es importante dimensionar el valor de un proyecto de este tipo. Hoy todos los informes sobre empleabilidad y educación realizados en el país en los últimos años confirman que la educación técnica y tecnológica es la más demandada y la que ofrece mejores oportunidades para generar empleo.
Ofrecer formación técnica y profesional de calidad es una de las mejores políticas públicas para ayudar a las personas a mejorar sus condiciones de vida.
Si queremos ser un país innovador, debemos fomentar la creación de este tipo de instituciones en cada uno de los municipios de la nación.
Se debe apoyar que, desde este Centro, se impartan cursos en áreas esenciales para el desarrollo profesional, como Manejo de Paquete de Oficina, Belleza, Electricidad, y cursos en áreas tecnológicas como Inteligencia Artificial, Desarrollo de Software, Control de Calidad, Administración de Proyectos Tecnológicos y DevOps.
La educación tecnológica y técnica debe ser el centro de nuestro proyecto país. Educar en tecnología es construir un futuro mejor para la República Dominicana. Sigamos trabajando para que la visión de una verdadera nación digital se convierta en realidad.
