José Armando Tavarez
La Asociación Dominicana de Rectores de Universidades (ADRU) celebró el primer diálogo académico en la historia de la República Dominicana con candidatos y candidatas presidenciales.
En el mismo, los hombres y mujeres que aspiran a dirigir los destinos de la nación, tuvieron la oportunidad de explicar sus propuestas en lo que tiene que ver con la educación superior, ciencia y tecnología. ¿Por qué ha sido histórico este evento? Por razones de evidente pertinencia.
Las sociedades crecen y se desarrollan gracias a su gente. La formación profesional, la creación de habilidades y capacidades, así como la investigación y desarrollo de nuevos conocimientos científicos y tecnológicos son las vías seguras que garantizan el progreso nacional. No puede existir un país moderno si no cuenta con el talento humano debidamente formando y capacitado.
Es por eso que la universidad debería ser uno de los componentes fundamentales de todo plan de gobierno. ¿Cómo se podría construir un mejor país si no potenciamos la institución que hace posible que el ciudadano alcance el máximo de su desarrollo?
¿Cómo se puede desarrollar la economía, la cultura, el deporte, y la sociedad en general sin antes fortalecer el sistema educativo en general y en específico la educación superior que forma y titula los profesionales que necesitamos?
Ha llegado el tiempo de la universidad, ha llegado la hora de la educación superior dominicana. Entendemos que se debe iniciar una nueva era en la que se permita el acceso universal a una educación superior de calidad. Solo así podríamos construir la patria que soñaron nuestros padres fundadores. Es tiempo de la universidad dominicana.
