FRÁNCFORT, ALEMANIA.-La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, dijo hoy que la economía de la zona del euro todavía necesita el apoyo de los estímulos fiscales y monetarios.
En un discurso en la Asamblea Parlamentaria franco alemana, Lagarde recordó que “si miramos a los últimos seis meses, el BCE no ha sido la única alternativa”.
“Nuestras medidas han sido complementadas por respuestas fiscales enérgicas a nivel nacional y europeo. Este ha sido un crítico factor importante en aliviar el impacto de la pandemia en el mercado laboral y en el préstamo bancario”, apostilló Lagarde en el discurso.
“Consideramos que la economía todavía necesita ese apoyo para que la recuperación continúe y se fortalezca más”, según la presidenta del BCE.
También destacó que “por primera vez, se puede usar un instrumento presupuestario común a nivel europeo para complementar los estabilizadores fiscales a nivel nacional, incluso, si es sólo temporal en estos momentos”.
Por ello, Lagarde también considera que “Europa se ha fortalecido durante esta crisis” y que es necesario seguir profundizando en la unión.
“Necesitamos completar finalmente la unión bancaria y crear una unión de los mercados de capital genuina”, afirmó Lagarde.
La Asamblea Parlamentaria franco-alemana está presidida por el alemán Wolfgang Schäuble, presidente del Bundestag, y el francés Richard Ferrand, presidente de la Asamblea Nacional francesa.
Caída del euro
En tanto, el euro cayó ayer, hasta el nivel de 1,1750 dólares, después de que la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, dijera que la recuperación económica de la zona del euro “es incierta, desigual e incompleta” y que son necesarios los estímulos monetarios y fiscales.
El BCE fijó ayer el tipo de cambio de referencia del euro en 1,1787 dólares.
El euro ha presentado hoy una tendencia bajista frente al dólar por la aversión al riesgo de los inversores, que también se reflejó en la caída de los mercados de valores.
Mercado de divisas
— Precio
El dólar se ha apreciado frente a muchas divisas porque se considera una inversión segura en momentos de incertidumbre. La moneda única se cambió en una banda de fluctuación entre 1,1750 y 1,1872 dólares.
