Los Ángeles.- Involucrado en variopintos proyectos, desde impulsar una fundación a cultivar su propio café, y a pocos días de comenzar su tour por EE.UU.
“Lo Sagrado y Lo Maldito”, el músico puertorriqueño Draco Rosa afirmó que vencer al cáncer le ha servido para “reordenar” sus prioridades vitales. “Ahora la vida es diferente.
Lo del cáncer me dio una segunda oportunidad y reordenó mis prioridades, lo que me gusta y lo que no”, confesó Draco Rosa en una conversación con Efe.
Sonriente, vitalista y con renovadas energías (a la entrevista llegó vestido con chaqueta de cuero tras apenas haberse bajado de la moto), Rosa (Nueva York, 1969) iniciará mañana la gira “Lo Sagrado y Lo Maldito” con un concierto en San Francisco, al que seguirán una decena de recitales más en ciudades como Los Ángeles, Dallas, Miami, Chicago o Nueva York.
El cantante argumentó que el título del tour refleja las contradicciones de su música y es “una metáfora del blanco y el negro, del rock and roll y la cara romántica” de lo que ha hecho a lo largo de su carrera.
Rosa subrayó también sus ganas de subirse al escenario para afrontar unos conciertos que serán muy libres, con sorpresas y muy abiertos a lo que suceda cada noche.
“Hay un público que tiene expectativas de escuchar la canción tal y como se hizo”, dijo sobre una experiencia menor y comparable, según su parecer, a reproducir un disco en casa.
“Si me piden que vaya a un tour y sea como ‘pulsar el botón de repetición’ (de la canción), no sé… Mi vida es demasiado corta para hacer eso, especialmente ahora”, opinó.
El puertorriqueño disfruta en la actualidad de un momento feliz después de unos años muy complicados de lucha por su salud.
En 2011 Rosa fue diagnosticado con un tumor canceroso cerca del hígado que reapareció en 2013, tras una aparente recuperación en la que grabó el interesante disco de duetos “Vida” (2013) junto a estrellas latinas como Juan Luis Guerra, Maná o Rubén Blades.
“Intento pensar en el lado positivo. Superar el cáncer es milagroso y es una jodida lotería”, dijo. “Superarlo me llevó cinco años y es aún un proceso en marcha.
Tomo mis medicinas todos los días, cada día menos y menos, y tengo efectos secundarios con los que lidiar. Pero no es suficiente para que deje de disfrutar de la vida”, explicó Rosa, quien no olvida los “momentos duros” de esta época como aquellos días en los que no quería irse a dormir porque pensaba que quizá no se despertaría.
Ahora acumula planes ya que continúa escribiendo nuevas canciones para un disco, música para una película y temas para un álbum cuyos fondos irán destinados a su fundación Vox Forte Alliance, cuyo objetivo es concienciar acerca del trasplante de médula ósea.
Asimismo, Rosa se mostró muy orgulloso de su marca de café “Café Horizonte”, un “proyecto hermoso” que desarrolla en Puerto Rico con el que busca elaborar un producto “artesanal, de buen sabor y orgánico” al tiempo que crea empleos, algo que “se necesita desesperadamente en la isla” por la crisis económica que sufre el país.
El músico, que comenzó su andadura en la banda infantil Menudo y luego construyó con tesón una importante carrera en solitario, afirmó que su lema vital es “arriesgar todo, lamentar nada».
Rosa también ha destacado como compositor y productor para otros artistas, especialmente para su compatriota Ricky Martin al que le escribió grandes éxitos como “Living la Vida Loca” o “María”, pero indicó que ha dejado de lado esa faceta para centrarse en su propia obra. “Es difícil navegar dos mares a la vez”, finalizó.