Washington.- Donald Trump se retractó apenas un ápice de su rechazo a decir, en su último debate contra Hillary Clinton, si aceptaría la derrota si pierde las elecciones.
La leve rectificación no detuvo la oleada de críticas de republicanos y demócratas sobre una actitud que, en opinión de algunos, golpea el corazón de la democracia estadounidense.
“Quisiera prometer y comprometerme ante todos mis votantes y partidarios y ante todo el pueblo estadounidense que aceptaré totalmente el resultado de esta gran e histórica elección presidencial”, dijo Trump, y tras hacer una pausa de varios segundos añadió: “si yo gano”.
Dejando de lado el tono de broma, Trump dijo que aceptará “un resultado electoral claro”, pero señaló que se reserva el derecho a “objetar o presentar una impugnación jurídica” en caso de que pierda el 8 de noviembre.
Aun así desestimó la posibilidad de que ello ocurra porque “no vamos a perder”. Uno de los que criticaron a Trump fue el senador John McCain, republicano por Arizona, que perdió ante Barack Obama en las elecciones de 2008.
“No me gustó el resultado de las elecciones de 2008. Pero yo tenía el deber de admitir la derrota y lo hice sin reticencias”, declaró McCain en un largo comunicado.
“El reconocimiento no es simplemente un ejercicio de bondad. Es un acto de respeto por la voluntad del pueblo estadounidense, un respeto que es la primera responsabilidad de cualquier líder estadounidense”, agregó.
Aunque Trump afirmó estar seguro de su victoria, numerosos líderes republicanos reconocen que Trump se enfila hacia la derrota, a no ser que ocurra un giro importante en los últimos días de la campaña.
La principal preocupación del Partido Republicano ahora es salvar su mayoría en el Senado, seguida de cerca por las preocupaciones sobre su control en la Cámara de Representantes.
El jueves por la noche se celebró la gala benéfica católica de la Alfred E. Smith Memorial Foundation en Nueva York, donde tradicionalmente los candidatos demócrata y republicano cambian la agresividad de la campaña por un humor mordaz y en definitiva hacen una muestra de unidad nacional.
La edición del jueves ofreció muchas risotadas sinceras, y unas pocas más incómodas. “Hemos demostrado que podemos ser civilizados entre nosotros”, dijo Trump sobre una rival de la que ha afirmado que debería estar en prisión por supuestos delitos penales.
“De hecho, justo antes de subir al estrado, Hillary se chocó conmigo sin querer y muy civilizadamente me dijo `Perdóneme”’, un juego de palabras para un término que también significa “indulto”, una poco sutil referencia a las frecuentes afirmaciones del magnate sobre que su rival debería ir a prisión.
Clinton, que habló después de Trump en la cena, bromeó: “No creí que fuera a parecerle bien una transición pacífica de poder”.
Sin embargo, Trump provocó algunos abucheos en el salón del hotel Waldorf-Astoria cuando tachó a Clinton de “corrupta” y dijo sin humor aparente que su rival había acudido al acto “fingiendo que no odia a los católicos”, una frase pronunciada durante un acto a beneficio de la archidiócesis católica de Nueva York.
Las bromas de Clinton fueron mordaces pero en un estilo más aceptado para la ocasión. Aunque varias mujeres han acusado a Trump de agresivos contactos sexuales, Clinton se mantuvo alejada de esa polémica pero aludió a sus comentarios públicos sobre el aspecto de mujeres con las que ha chocado: “Donald mira a la Estatua de la Liberta y ve un 5”, dijo Clinton. “Quizá un 5, si suelta la antorcha y la tablilla y se cambia el peinado”.
Durante un mitin en Ohio antes el jueves, Trump intentó desviar la atención hacia Clinton, a la que acusó de “hacer trampas” y dijo que debería “dimitir de la carrera”.
El empresario citó un correo electrónico pirateado, que hizo público WikiLeaks y que muestra que la campaña de la demócrata recibió información sobre una de las preguntas que le harían en una reunión municipal organizada por CNN durante las primarias demócratas.
“¿Pueden imaginarse si yo hubiera recibido las preguntas? Pedirían la reinstauración de la silla eléctrica, ¿no están de acuerdo?”, dijo Trump.