Diversas personalidades lamentan muerte de Muhammad Ali

Diversas personalidades lamentan muerte de Muhammad Ali

Diversas personalidades lamentan muerte de Muhammad Ali

Diversas personalidades de todo el mundo lamentaron la muerte del tres veces campeón de peso completo Muhammad Ali.

Algunos lo consideraron el más grande del deporte,  otros como campeón mundial de la igualdad y la paz, un guerrero que luchó contra la discriminación  y que conmocionó al mundo.

“Hoy es un día triste para mí, y para todo el mundo. Muhammad Ali fue más grande que el deporte, y más grande que la vida misma. El dijo que era `El Más Grande’, y estaba en lo cierto. Fue el más grande de su era en el cuadrilátero, y un ícono mundial del deporte. Yo era un niño en su época de gloria, pero recuerdo algunas de sus peleas épicas y su estilo increíble. Mis más sinceras condolencias a su esposa, Lonnie, sus hijos y su familia”, Michael Jordan.

«Pensando en (hash)MuhammadAli y recordando a un hombre que no tuvo miedo de defender sus creencias, y que estaba comprometido con ser auténtico”, dijo en un tuit la leyenda del tenis Billie Jean King.

“El señor Ali fue mucho más que un boxeador legendario; fue un campeón mundial de la igualdad y la paz. Con una combinación incomparable de principios, encanto, ingenio y gracia, luchó por un mundo mejor y utilizó su podio para elevar a la humanidad”, vocero del secretario general de la ONU, Ban Ki Moon.

“El mundo perdió a un gran Campeón. Muhammad Ali, amante de los seres humanos, guerrero en la lucha contra la discriminación… un gran amigo”, tuit del ex jugador de la NFL, Jim Brown.

“Ali, el G-O-A-T (Más Grande de Todos los Tiempos). Un gigante, una inspiración, un hombre de paz, un guerrero por la cura. Gracias”, Tuit del actor Michael J. Fox, quien tiene la enfermedad de Parkinson.

“Conmocionó al mundo, y el mundo es mejor por eso. Descansa en paz, Campeón”, tuiteó el presidente estadounidense Barack Obama.

“El universo del deporte acaba de sufrir una tremenda pérdida. Muhammad Ali fue mi amigo, mi ídolo, mi héroe. Compartimos muchos momentos, y siempre nos mantuvimos en contacto durante los años. Siento una tristeza abrumadora, le deseo que descanse en paz con Dios. Mando mi amor y fuerza a su familia”, tuiteó Pelé, el legendario futbolista brasileño.

“Se fue el mejor de todos los tiempos, con mucha diferencia. Fue el único hombre que me hizo ver llorar a mi papá cuando lo vió de frente en vivo en la pelea entre Ray Sugar Leonard y Tommy Hearns, en Las Vegas, en el año `81. ¿Así que cómo no voy a sentir esta pérdida, si es lo que más admiraba mi viejo? En el ring era un bailarín. Seguramente se fue porque ya no podía darnos más felicidad, porque cada vez que subía a un ring, la rompía. Mi sentido pésame a su familia”, escribió en su cuenta de Facebook el astro del fútbol argentino Diego Maradona.

“Muhammad Ali trascendió el deporte con su personalidad y dedicación a los derechos civiles y la justicia social. Fue una presencia inspiradora en varios eventos importantes de la NBA y era profundamente admirado por muchos en la liga. Aunque estamos muy tristes por su partida, el legado de Muhammad Ali vive en cada atleta que defiende sus creencias”, dijo el comisionado de la NBA Adam Silver.

“Sacrificó el mejor momento de su carrera, y gloria y dinero, por sus creencias religiosas sobre una guerra que le parecía injusta e innecesaria. Su recuerdo y legado vivirán hasta la eternidad”, dijo el reverendo Jesse Jackson, presidente y fundador de la Coalición Arcoiris y amigo de Ali.

“Muhammad Ali no solo fue un campeón en el cuadrilátero. Fue un campeón de los derechos civiles, y un ejemplo para muchos”, tuiteó el primer ministro británico David Cameron.

“Es la figura más transformadora de mi era, desde luego. Hizo incluso más que Martin Luther King por cambiar las relaciones raciales y la opinión de la gente. Fue un privilegio y un honor para mí conocerlo y asociarme con él”, dijo Bob Arum, promotor de 26 combates de Ali.

“Ali, Frazier y Foreman éramos un solo hombre. Una parte de mí se ha perdido. `La pieza más grande”’, tuiteó George Foreman, rival de Ali en el combate “Rumble in the Jungle”.

“Muhammad Ali es una leyenda y uno de los atletas más celebrados del mundo, el combatiente que introdujo la era dorada del boxeo y puso el deporte en el mapa. Allanó el camino para luchadores profesionales, incluido yo, elevando el boxeo para convertirlo en un deporte seguido por millones de personas en hogares de todo el mundo”, dijo el boxeador Oscar de la Hoya, que ganó títulos en seis categorías de peso diferentes.

“Hoy perdimos un gigante. El boxeo se benefició de los talentos de Muhammad Ali, pero no tanto como la humanidad se benefició de su cualidad humana. Nuestros corazones y plegarias son para la familia Ali. Que Dios les bendiga”, dijo el boxeador Manny Pacquiao, campeón en ocho categorías de peso.

“Pasar la antorcha olímpica a Muhammad para encender el pebetero en los Juegos de Atlanta en 1996 fue el momento definitorio de mi carrera, y un recuerdo que atesoraré por siempre, tanto como las medallas que gané. Como deportistas olímpicos, nuestra labor es inspirar a otros para cumplir sus sueños, y nadie ha ejercido más ese papel que Muhammad Ali”, dijo la nadadora Janet Evans.

“Sin duda, su legado es uno que desafió las probabilidades porque defendió aquello en lo que creía y cuando se le puso a prueba asumió daño personal en lugar de ir contra sus creencias y aquello que defendía”, dijo Don King, promotor de los combates “Rumble in the Jungle” y “Thrilla in Manilla”.

“Estamos orgullosos no sólo de llamar a Ali miembro del Equipo de Estados Unidos, sino campeón olímpico. Con un coraje y una determinación sin parangón, dejó un legado que seguirá inspirando a generaciones de estadounidenses en los años venideros”, dijo Scott Blackmun, director general del Comité Olímpico de Estados Unidos.

“El fallecimiento de Muhammad Ali nos entristece a Hillary y a mí. Desde el día en que ganó la medalla de oro olímpica en 1960, los aficionados al boxeo de todo el mundo supieron que asistían a una mezcla de belleza y gracia, velocidad y fuerza, que quizá nunca llegue a igualarse. Le vimos crecer desde la descarada confianza de la juventud y el éxito a una madurez llena de convicciones políticas y religiosas que le llevaron a tomar decisiones difíciles y vivir con las consecuencias. Por el camino le vimos audaz en el cuadrilátero, inspirador con los jóvenes, compasivo con los necesitados y fuerte y con buen ánimo al cargar el lastre de sus problemas de salud. Tuve el honor de entregarle la Medalla Presidencial de los Ciudadanos en la Casa Blanca, de verle prender la llama olímpica y de forjar una amistad con un hombre que, a través del triunfo y las dificultades, se hizo aún más grande que su leyenda. Nuestros corazones están con Lonnie, sus hijos y toda su familia”, dijo el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton.

“Fue un atleta que tocó el corazón de gente en todo el planeta, un atleta comprometido más allá del deporte, un atleta que tuvo el coraje de dar esperanza a tantos afectados por la enfermedad al encender el pebetero olímpico y no ocultar su propia aflicción. Fue un atleta que luchó por la paz y la tolerancia, era un auténtico deportista olímpico. Conocerle en persona fue una inspiración. Era un hombre que era al mismo tiempo muy orgulloso y sin embargo muy humilde”, dijo el presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach.