Santo Domingo.-Mantiene su sonrisa intacta, mueve la cintura con mucha facilidad, y siempre tiene una anécdota guardada para hacer reír a quienes se va encontrado en el camino.
Se trata del llamado “rey del merengue”, Joseíto Mateo, quien entre aplausos, elogios y silbidos de sus colegas recibió un reconocimiento como “Leyenda viva del merengue y de la música popular dominicana”, otorgado por la Cámara de Diputados.
Sonriente
El acto se realizó en un salón pequeño del órgano congresual que le confirió el honor, a donde Mateo llegó sonriente y saludando a varios merengueros que llegaron temprano para apoyar al artista en este capítulo de su vida.
Estaban en la sala Fernando Villalona, Rafa Rosario, Vinicio Franco, Frank Cruz, Maridalia Hernández, Ramón Orlando, Sergio Vargas, Crispín Fernández y otros merengueros que al ver entrar a Mateo le tributaron un fuerte aplauso.
La vicepresidenta de la Cámara y autora de la iniciativa, Lucía Medina Sánchez, leyó el reconocimiento y aprovechó para expresar: “Hoy hemos estado honrando la trayectoria de vida de un ser alegre que lleva la investidura de un gran merenguero, no en vano se le reconoce como “rey del merengue” en República Dominicana y para el mundo”, Mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, dijo que Joseíto era un artista noble de una trayectoria limpia, que siempre ha puesto en alto el nombre del país, y que era un honor reconocerlo cuando hace unos días cumplía 94 años.
“Aunque me salga un poco del protocolo, quiero aprovechar todas estas voces para que le cantemos cumpleaños feliz al señor Joseíto”, petición cumplida cuando todos se unieron a festejar al merenguero.
Emocionado, con los ojos enrojecidos, Mateo agradeció el honor de reconocerlo, pero en un gesto de humildad aclaró que él no es el autor del merengue “La chiva blanca de don José”, presentando a Juan Santos como el autor quien se encontraba en el acto.
Al finalizar, el cantante dijo que aunque había cumplido esa edad, entiende que todavía hay “Joseito Mateo para rato”, provocando nuevamente aplausos de los presentes quienes lo despidieron con un “Joseíto te queremos, te queremos Joseito”.
