Frederich E. Bergés
Una de las preguntas más frecuentes que recibo al encontrarme con amigos o conocidos es: ¿dime del 2023? Los acontecimientos recientes de la pandemia, y luego el proceso inflacionario post pandemia, han sido las características de los últimos tres años y con ello sembrando más incertidumbre económica de la que nos habíamos acostumbrado en la década anterior.
Para ello me permito referenciarme al proyecto de Presupuesto General de la nación para el año venidero. Y en ello, reiterando que las premisas son una inflación interanual del 4 %, una tasa de cambio promedio del RD$56.95 por US$1.00 y el barril de petróleo WTI en el rango de US$89.10. Una variación de estas premisas invalidaría cualquier pronóstico.
Lo más sobresaliente del Presupuesto no es si los ingresos aumentan un 10 u 11 %, o que el gasto público aumenta en vez de bajar.
Lo importante es que se espera de nuevo un déficit fiscal estimado en el equivalente a un 3 % del Producto Interno Bruto (PIB), o lo que es igual, a RD$207,573 millones. Se evidencia que seguirá la política de endeudamiento para cubrir dicho déficit y que no se contempla reforma fiscal en procura de nuevos o aumentadas recaudaciones.
Más aún, el aumento de la deuda pública contemplado en más de RD$233,000 millones será en un escenario de tasas de interés incrementadas, elevando con ello la cantidad de recursos requeridos para pagar interés y vencimientos, por más de la quinta parte del Presupuesto.
Con esto y la continuidad de subsidios por unos RD$90,000 millones sumados a las cada vez más crecientes ayudas sociales, no se puede esperar mayores inversiones públicas en infraestructuras ni el inicio de obras públicas de envergadura.
Finalmente, el Presupuesto no contempla el ajuste por inflación de los ingresos de las personas físicas. La tasa de cambio aumentará revertiendo la tendencia de revaluación del presente año, y la informalidad se incrementará a más del 58 % que representa en la actualidad, agravando con ello los presupuestos de cada persona. Preparémonos para el 2023, que luce no vendrá mejor que años recientes.
