SANTO DOMINGO.-En tan solo un mes, diez mujeres fueron ultimadas por sus parejas o exparejas, teniendo como elemento común, en la mayoría de los casos, el uso de armas blanca.
De igual manera, dichos sucesos tienen la particularidad de que los “feminicidas” han decidido quitarse la vida tras cometer los hechos, aunque algunos lograron sobrevivir. y uno de ellos permanece prófugo.
La víctima más reciente es Luisa María Báez Castillo, de 28 años de edad, quien falleció ayer tras recibir varias heridas de arma blanca hechas por Jean Carlos Genao de Jesús.
El victimario está hospitalizado, ya que la mujer lo hirió mientras se defendía del ataque.
La pareja, la cual había procreado dos hijos, se habría enfrascado en una discusión en el interior de su vivienda ubicada en la calle 2, del sector Palmarito, en La Vega, según revelaron vecinos.
Entre los días viernes y lunes fueron ultimadas por sus exparejas Gladys Alvarado, Leónidas Mueses José (Yadira) y Fátima Guzmán, en hechos ocurridos en Los Alcarrizos, Sabana Perdida y La Guáyiga, Pedro Brand.
Guzmán, quien participó en el pasado proceso de primarias como precandidata a alcaldesa por el distrito municipal de La Guáyiga, fue ultimada el viernes por su pareja Humberto Buzí, quien luego intentó suicidarse y permanece en condición delicada en un centro de salud.
Ese mismo día, Salvador Tapia, de 63 años, aguardó a que Leónidas Mueses José, de 39, saliera de su trabajo y la persiguió hasta alcanzarla para propinarle al menos 11 heridas de arma blanca en la calle 7 del sector Pueblo Nuevo, de Los Alcarrizos.
A primeras horas del lunes, Gladys Alvarado recibió 24 estocadas de manos de Manuel Montero Ogando, quien permanece estable en un centro de salud por las heridas que se causó. La occisa decidió terminar la relación que mantenía desde hace un año, sin embargo, este se negaba y “hostigaba”, según manifestaron familiares.
Situación preocupante
El psicólogo Luis Bergés calificó la situación como preocupante, al asegurar que el feminicidio no es más que el resultado final de una situación en la que hay un círculo de la violencia establecido, donde incluso viola su propia regla de protección, mientras la otra posee vocación criminal que espera cualquier detonante.
“Esto nos deja una reflexión sobre porqué el Mes de la no Violencia Contra la Mujer se convierte en un detonante”.
Bergés aconsejó a la población femenina a que tan pronto sean víctima de cualquier acción violenta asuman una postura en la que deba buscar protección y red de apoyo. Recordó que los feminicidas suelen tener manifestaciones violentas previo a la comisión del asesinato de la mujer.
Cifra
64 Mujeres.
Es la cifra fatal de feminicidios registrados desde enero a la fecha.