El perímetro externo de la embajada haitiana fue reforzada ayer tras el asesinato del presidente haitiano, Jovenel Moíse.
SANTO DOMINGO.- En las primeras horas del miércoles, Joly Titus, un joven haitiano residente en Santo Domingo, no daba crédito al contenido de las notificaciones que llegaban a su celular.
Minutos antes, a las cinco horas y cuarenta y seis minutos de la mañana, EL DÍA había publicado la trágica noticia que fue a su vez replicada a la velocidad del click. Casi por instinto, Titus recurrió a varios medios oficiales antes de aceptar para sus adentros los hechos, había sido asesinado el presidente haitiano, Jovenel Moïse.
“Cuando confirmé la noticia mi corazón se desbarató. Ahora mismo me siento preocupado por mi familia. Si eso le pasó al presidente, que tiene seguridad, qué no podrá pasarle a mis familiares”, afirmó Titus compungido.
El joven aprovechó para hacer referencias a las manifestaciones violentas que desde hace meses, habían sido realizadas en el vecino país para exigir la renuncia de Moïse y/o la realización de elecciones presidenciales. “Todo el mundo sabía que para salir del tranque mi país tenía que volver al polvo”, dice Titus, solo que para él, no era la manera de solucionar las cosas.
No tenían derecho
“Era el presidente de Haití, era un presidente —repite— y aunque fuera un policía, merece vivir, aunque fuera un perro, merece vivir, pero era más, era un presidente y es injusto que acabara así”.
Un comentario similar emitió la señora Denisse Delfonso, quien vende artículos comestibles desde un triciclo, cuando un reportero le preguntó por la manera de gobernar de Moïse. “No importa si estaba trabajando o no, era el presidente de Haití, nadie tenía derecho de matarlo, sino ir a elecciones”.
Si bien las labores consulares habían sido suspendidas, el lugar se llenó con la presencia de curiosos, periodistas y por supuesto, nacionales haitianos que suspendieron sus labores cotidianas para estar en el lugar desde donde se esperaba emanaran informaciones oficiales.
Louis Julié, otro haitiano residente en República Dominicana, aseveró que los planes de cambios de la Carta Magna atacaban de pleno la oligarquía de su país y que eso, pudo haber desencadenado el crimen.
“Nadie quiere esto para su país, queremos la paz de Haití para que pueda empezar a desarrollarse”.
Joly Titus
Haitiano residente SD