Ha causado roncha el gozoso estribillo “en FUNGLODE se goza mucho más” que tocó Johnny Ventura en la fiesta de Navidad ofrecida por el ex presidente Fernández.
Sus adversarios quieren verlo como una provocación, dada la atinada disposición gubernamental de no celebrar oficialmente festejos de fin de año por las recientes trágicas inundaciones.
Desde hace años, los enemigos del PLD han maquinado de mil maneras para incordiar a los dos líderes naturales de ese partido, el Presidente Medina y el dueño de FUNGLODE. Y casi lo logran.
Pero el principal rasgo diferenciador y positivo de los dirigentes peledeistas, que los hace aventajar a otros políticos, es su sentido de pertenencia a un propósito mayor que sus ambiciones personales.
Pese a sus pesares –muchos, pesados, inexcusables— los peledeistas vuelan más alto que los demás políticos.
El propio Fernández, quien dizque preguntó por colaboradores suyos ausentes porque nadie los invitó, dijo clarito en el archi-visto videíto de la fiesta: es imprudente batir ahora la cuestión de la nominación presidencial de 2020. ¡Cuánto gadejo!