Miami .- Una persona fue detenida en las inmediaciones del campo de golf donde estaba jugando el expresidente estadounidense, Donald Trump, mientras portaba un arma larga, un rifle AK47, y tenía la intención de atacar al candidato republicano.
Según medios como CNN, el Servicio Secreto disparó contra el sospechoso y tras el suceso se recuperó un arma larga. Las autoridades creen que el individuo tenía la intención de atacar al exmandatario (2017-2021), quien se encuentra a salvo.
La Oficina Federal de Investigación (FBI, en inglés) confirmó este domingo que el suceso junto al campo de golf donde estaba jugando el expresidente estadounidense Donald Trump está siendo investigado como un “intento de asesinato”.
“El FBI ha respondido a West Palm Beach, Florida, y está investigando lo que parece ser un intento de asesinato del expresidente Trump”, apuntó en un comunicado.
El Servicio Secreto informará este domingo en una conferencia de prensa de los detalles de lo sucedido, ya que todavía no han confirmado de manera oficial qué ha sucedido exactamente.
El FBI confirma que está investigando un “intento de asesinato” contra Trump
La Oficina Federal de Investigación (FBI, en inglés) confirmó que el suceso está siendo investigado como un aparente “intento de asesinato”.
“El FBI ha respondido a West Palm Beach, Florida, y está investigando lo que parece ser un intento de asesinato del expresidente Trump”, apuntó en un comunicado.
La reacción de Trump
Trump afirmó este domingo que se encuentra bien tras el incidente violento registrado junto a su campo de golf, del que todavía se desconocen los detalles.
“Hubo disparos cerca de mí, pero antes de que los rumores comiencen a salirse de control, quiero que escuches esto primero: ¡ESTOY A SALVO Y BIEN!”, apuntó en un comunicado de prensa.
El candidato republicano a la presidencia estadounidense, quien el pasado 13 de julio sufrió un intento de asesinato, añadió: “Nada me detendrá. ¡NUNCA ME RENDIRÉ!”.
Trump estaba jugando golf
Lo poco que se sabe es que minutos después de las 14.00 de la tarde (18.00 GMT) la campaña de Trump anunció que el exmandatario está “a salvo” luego de que se registraron disparos cerca de su club de golf en Palm Beach, Florida.
“El presidente Trump se encuentra a salvo tras los disparos que se produjeron en sus inmediaciones. No hay más detalles por el momento”, apuntó en un escueto texto distribuido a la prensa Steven Cheung, director de comunicaciones de la campaña.
El suceso se produjo cerca de su club de golf en West Palm Beach, Florida, donde el expresidente se encontraba jugando ese deporte y se espera que se ofrezcan nuevos detalles sobre lo sucedido.
De acuerdo con la cadena NBC News, Trump fue inmediatamente trasladado a un lugar seguro cuando se escucharon los disparos.
Reacción de la Casa Blanca
Por su parte, la Casa Blanca informó que el presidente de EE.UU., Joe Biden, y la vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris, les informaron “sobre el incidente de seguridad en el campo de golf Trump International, donde el expresidente Trump estaba jugando. Están aliviados de saber que está a salvo. Su equipo los mantendrá informados periódicamente”.
Teri Barbera, portavoz de la Oficina del Sheriff del Condado de Palm Beach, confirmó al diario New York Times que se produjo un tiroteo “en las cercanías el campo” de golf y que una “persona de interés” resultó detenida, dijo.
Aliviados
“Están aliviados de saber que está a salvo. Su equipo los mantendrá informados periódicamente”, dijo la Presidencia.
El Servicio Secreto envió un comunicado en el que apuntó que está investigando lo sucedido en colaboración con la Oficina del Sheriff del Condado de Palm Beach.
Trump fue víctima de un intento de asesinato el pasado 13 de julio durante un mitin en Butler (Pensilvania), después de que un joven de 20 años le disparó con un fusil hiriéndole en la oreja derecha.
El atentado contra Trump
El Servicio Secreto abatió al agresor, quien disparó desde un lugar elevado fuera del recinto, donde una persona del público murió por herida de bala.
El suceso provocó numerosas dimisiones por las fallas de seguridad del evento, incluso la de la entonces directora del Servicio Secreto estadounidense, Kimberly Cheatle.
Cheatle acabó dimitiendo diez días después por los errores en la seguridad en ese encuentro y afirmó que ese intento de asesinato supuso el “mayor fallo operativo” de la agencia “en décadas”.
Tras esto, el Servicio Secreto aprobó un plan para incrementar la seguridad de Trump, que incluye el uso de pantallas de vidrio blindado en los eventos que se lleven a cabo en exteriores.