Mujeres recién paridas que fueron llevadas junto a otras 90 personas en el albergue El Salado, provincia La Altagracia. Foto: Alberto Calvo/El Día.
El SALADO, provincia La Altagracia.-En condiciones infrahumanas están 94 personas de la comunidad El Cajuil que fueron desplazadas a la escuela pública de aquí.
Unos 42 de los albergados son menores con edades entre los 10 días de nacido y 17 años. Hay cinco mujeres paridas durmiendo en el suelo en pequeñas colchas con sus infantes, algunos de los cuales ya presentan síntomas de gripe, mientras la lluvia no cesa.
«Mi bebé se congestionó y solo tiene un mes. No he recibido la visita de médicos», dijo Oscairy Reynoso, de 20 años de edad, quien tiene apenas un mes de parida.
Los comunitarios de El Cajuil fueron trasladados a esta escuela al mediodía de ayer y lo poco que han comido es lo que ellos mismos trajeron.
«Ni los comedores económicos, ni el Plan Social de la Presidencia, ni la gobernación provincial han traído las tan anunciadas ayudas y raciones de alimento», dijo uno de los dirigentes comunitarios.
Los residentes en El Cajuil fueron traídos hasta aquí, porque el centro comunal de su sector no estaba en condiciones para habilitarlo como albergue.
«Mi hijo está tupido y duermo mal», así se expresó Beatriz Bocico, una mujer con 10 días de haber dado a luz a su hijo.
María Berroa, presidenta de la Junta de Vecinos Nuevo Amanecer de El Cajuil, y quien está a la cabeza del albergue que aún espera por el auxilio de autoridades.
Mientras que el alcalde está trabajando en la habilitación de las vías de acceso a la comunidad, el gobernador provincial, quien maneja las ayudas de los comedores económicos y el plan social, a pesar de tener conocimiento de la situación no se ha dado la cara, dijeron los afectados.
