Denuncias por incesto se duplican en un año; la provincia Santo Domingo encabeza estadísticas

Denuncias por incesto se duplican en un año; la provincia Santo Domingo encabeza estadísticas

Denuncias por incesto se duplican en un año; la provincia Santo Domingo encabeza estadísticas

SANTO DOMINGO.-Los casos de incesto aumentaron el año pasado en un 239% en relación con el 2016.  De acuerdo con el Informe Preliminar Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la Procuraduría General de la República, en 2017 hubo 401 denuncias de incesto, mientras que en 2016 esa cifra fue de 168.

Las provincias con las estadísticas más  altas de denuncias de incesto, son Santo Domingo que encabeza la lista de las Unidades Especializadas en Violencia de Género con más denuncias: 257 en 2017 y 44 en 2016; en el Distrito Nacional el año pasado fueron denunciados 22 casos y en  2016, 29; en Santiago, en 2017 la Unidad recibió  45 denuncias y en 2016, 36 casos.

En La Vega en 2016 se denunciaron cinco casos de incesto; en 2017, siete; en San Cristóbal  la Unidad Especializada en Violencia de Género el año pasado el recibió cinco denuncias,  frente a 10 en 2017.

El incesto es el abuso sexual cometido hacia una persona, niño o adolescente con el que existe una relación de parentesco por consanguinidad y/o afinidad, significa la relación sexual entre las personas que son familiares y no pueden casarse por ley, esto abarca también la relación sexual entre un padrastro y un hijastro.

Es importante destacar que muchos casos de incesto no son denunciados en la familia que se quedan como “secretos de familia”, pues pesa más la lealtad hacia el sistema familiar a que se haga justicia.

Pero también hay miedo a las represalias del  violador (que  en muchos de los casos es también un agresor), vergüenza por el estima social y como una manera de la familia “proteger” a la víctima de ante los comentarios que pudieran ser despiadados de la comunidad.

Consecuencias psicológicas

Los niños, niñas y adolescentes que han sido víctimas de cualquier tipo de abuso sexual, tienden a tener (tanto en el  momento que son víctimas como en su vida posterior)   sentimientos de culpa, vergüenza, baja autoestima, sentimientos de inadecuación y de estigmatización, trastornos depresivos por ansiedad, trastorno por estrés postraumático (TEPT), conductas y juego sexualizados, exceso de curiosidad sexual, problemas escolares (disminución del rendimiento escolar, dificultades relacionales)  aversión al sexo, agresividad.

Hasta el momento en el país no hay centros de atención psicológica especializada en acompañar a niñas, niños y jóvenes y adolescentes víctimas de incesto o de cualquier tipo de abuso sexual.  Muchos de los casos son de familias muy vulnerables que no tienen recursos económicos para pagar consultas psicológicas que son una necesidad para que la víctima pueda superar la crisis que detona ese hecho en su vida.

Disminuyen cantidad de denuncias por delitos sexuales

A pesar de que las denuncias por incesto aumentaron, los delitos sexuales en general, disminuyeron.  En 2016, hubo un total de 6,441 denuncias, mientras en 2017, 5,808.

En 2016 a nivel nacional se registraron 2,105 denuncias por agresión sexual; 1,167 por violación sexual; por acoso sexual; 1,963 denuncias por seducción de menores; 66 por exhibicionismo y 168 por incesto.

En 2017, las Unidades Especializadas en Violencia de Género recibieron 1,690 denuncias  por agresión sexual; 1,238 por violación sexual; 435 por acoso sexual; 1,799 por seducción de menores; 245 por exhibicionismo y 401 por incesto.