El dominicano Dellin Betances es reconocido como uno de los mejores relevistas medio de las GL.
Miami.-Cuando le llegue otra vez el momento para negociar su contrato con los Yanquis de Nueva York, el dominicano Dellin Betances se apoyará en el refrán popular entre nosotros que reza que “el que ríe último ríe mejor”.
Un allegado a Betances reveló a EL DÍA que la guerra que protagonizaron sus agentes con el presidente de los Yanquis, Randy Levine, durante la audiencia de arbitraje salarial en febrero pasado está en “pausa”, pero no olvidada.
Betances, quien es uno de los estelares peor pagados del negocio, tuvo que soportar las burlas de Levine, dijo recientemente que le está enseñando al mundo el talento que tiene y que está muy orgulloso de todo lo que ha logrado en muy poco tiempo.
“Lo mío es hacer mi trabajo lanzando, sobre mi salario se encargará mi agente”, dijo Betances, quien fue seleccionado por cuarta temporada consecutiva al Juego de las Estrellas .
“Estoy muy orgulloso de todo lo que he logrado y mucho más porque son los jugadores con los que compito quienes reconocen mi labor”, replicó Betances, quien apenas tiene salario de US$3 millones.
Gran temporada
Dellin está en otra gran campaña con marca de 3-4, seis salvamentos y efectividad de 2.87 en 35 juegos. Ha lanzado 31 entradas y un tercio, permitiendo 15 hits, 11 carreras (10 limpias), 27 boletos y 59 ponches.
Ataques de Levine
Levine arremetió contra el agente de Betances, acusándolo de avaricia y de utilizarlo como peón en las negociaciones con los Yankees, Catalogó las demandas de los representantes de Betances como “exageradas” y “con poco sentido de la realidad” e incluso se burló de que el versátil relevista fuera descrito durante el proceso como cerrador, diciendo: “Es como si yo dijera que no soy el presidente de los Yankees, que soy un astronauta.
Lo que sus agentes hicieron fue convertirlo en una víctima en su intento de cambiar un mercado en el béisbol que ha estado bien establecido durante 30 o 40 años”, dijo Levine, quien luego de la audiencia trató de hacer las paces con Betances.
