Delito de sufragio y polo patriótico

Delito de sufragio y polo patriótico

Delito de sufragio y polo patriótico

Wilfredo Mora

Las pasadas Primarias no fueron un triunfo electoral para el sector gubernamental. Diríase que pueden perder las elecciones en 2020.

Desde hace un tiempo considerable no se hace política en el país con respeto; los políticos dominicanos han dañado la política y, por ende, perturbaron el proceso de las candidaturas de las pasadas elecciones.

Se pueden evitar muchos delitos de sufragio si se pudiera dar carácter de obligatoriedad en que los ciudadanos que concurran a las elecciones (tal es el caso de Brasil, según la Ley 9504, 30 de septiembre de 1997, donde es facultativo para adolescentes de 16 y 17 años, mayores de 70 y analfabetos, pero es obligatorio para la población de entre 18-70) y considerar que hablar de delito de sufragio implica que, al menos, se puedan enumerar y que se presentan en la época electoral antes del día señalado.

Estos delitos son los siguientes: 1) Perturbación del certamen democrático; 2) Constreñimiento al sufragante; 3) Fraude al sufragante; 4) Corrupción al sufragante; 5) Voto fraudulento; 6) Favorecimiento al voto fraudulento; 7) Mora en la entrega de documentos relacionados con una elección; 8) Alteración de resultados electorales; 9) Ocultamiento, retención y posesión ilícita de cédula; 10) Denegación de inscripción y 11) Fraude a inscripción de cédulas (Véase el Código Penal colombiano, 2008). Pero no fue por causa de delitos contra el sufragio que surgió nuestra ley electoral en nuestra legislación, sino por una Ley de Partidos que aún no tenemos.

No pretendemos ahora un análisis a la Ley Orgánica de Régimen Electoral 15-19 (arts. 284-290). Lo que nos preocupa ahora es el polo patriótico de la futura contienda electoral, ya que las Primarias pasadas, fue violentada con el llamado “comercio del voto”, con las impugnaciones al órgano electoral, debido al procedimiento informatizado que derivó en la crisis de una organización política, que hoy se ha dividido.

De cara a las elecciones presidenciales de 2020, nos enfrentaremos a la más difícil coyuntura electoral antes vivida: impedir que fracasen y convulsiones aún más la sociedad.
Porque ahora está marcada por la corrupción el dispendio de los recursos del Estado como nunca antes se había practicado.

Por ello, la idea de conformar un Polo democrático frente a la boleta del gobierno, es algo más allá de las alianzas electorales, y es algo que de no hacerlo puede degradar en una situación de terror, llevando unos a la cárcel, y al pueblo a una guerra civil.

Ahí está el ejemplo de Venezuela y ahora de Bolivia. Dos casos, donde los opositores al gobierno no se conformaron en un polo democrático y unitario. La cadena de sucesos que definieron estas Primarias y las acusaciones a los candidatos del gobierno son más que suficiente para emprender la lucha política.