Reportaje al Barrio Valiente,sobre la delicuencia y los robos a las parroquias Sagrada Familia de Nazaret y Niño Divino ,del sector/foto Jose de Leon
Santo Domingo.-La inseguridad que afecta al sector El Valiente en Santo Domingo Este, ha llegado al extremo de que una parroquia y dos capillas católicas de la demarcación han sido asaltadas por desaprensivos en los últimos meses, quienes actúan a cualquier hora del día.
El caso más reciente ocurrió este domingo, cuando dos parroquianas de la iglesia Sagrada Familia de Nazaret se disponían a abrir el referido templo.
“La noche anterior habíamos celebrado una misa en un barrio de aquí y a las 6 de la mañana fui a la iglesia a llevar el copón, la vestimenta sagrada del padre y otros objetos y no bien llegué al frente cuando dos hombres me pusieron un cuchillo en el cuello y se llevaron todo lo que tenía”, manifestó Luz Divina Beltré Peña.
A parte del bulto con los objetos eclesiásticos, la mujer cargaba en su cartera RD$1,500 que también se llevaron.
Esa fue la tercera vez que los delincuentes, quienes han tomado el control de El Valiente, robaban en dicha iglesia.
“En las otras ocasiones se metieron dentro y se llevaron seis abanicos, casi todas las sillas, otro copón y las vestimentas del padre”, recordó Beltré Peña, quien ahora siente temor e incluso una niña que le acompañaba ha tenido que ser tratada en un centro de salud por el nerviosismo que siente.
A varios metros de la iglesia Sagrada Familia de Nazaret se encuentra otro templo católico llamado Divino Niño, que también ha sido objeto de saqueos.
Al lado de esta iglesia estaba la casa del sacerdote, a quien semanas atrás le llevaron electrodomésticos, celulares y dinero en efectivo, explicó Mariana Suárez, quien es catequista.
Los feligreses de la zona indican que robos similares se han registrado en la iglesia San Pío que se encuentra en ese populoso sector.
Falta patrullaje
El robo en las iglesias es solo una muestra de la alarmante situación en El Valiente, donde al caminar por sus calles, en su mayoría polvorientas, los moradores exigen un cambio en los agentes policiales de la zona.
“Yo tengo un colmadito aquí y los otros días se entraron y me llevaron toda la mercancía”, dijo Leonilda Pérez.
Pese a los constantes asaltos, los ciudadanos lamentan que no se aprese a los responsables de cometer los hechos. “La Policía tiene que ponerse las pilas”, expresó la mujer.