¡Del Enfoque depende el éxito!

¡Del Enfoque depende el éxito!

¡Del Enfoque depende el éxito!

Mayra de Peña

Recientemente estuve oyendo sobre una leyenda en un programa de radio cristiano que tocó mi corazón, por la sabiduría que entraña. Dice la misma que un Rey muy rico fue abordado por uno de sus siervos que le preguntó cómo él había adquirido tanta riqueza y el Rey le respondió, que se lo demostraría invitándolo a su palacio a ver todo lo que poseía. Al entrar al palacio el Rey le dijo que había una condición, tenía que entrar con una vela encendida por cada una de las áreas y si dejaba apagar la luz, lo decapitaría.

Al término del recorrido el Rey le preguntó: ¿qué tal te ha parecido el palacio y todos sus tesoros?, el siervo le respondió, ¨en realidad no lo he visto porque estaba enfocado en que la luz no se me apagara¨, entonces el Rey le respondió que de esa manera él se había enriquecido…no quitando su mirada del objetivo para lograr lo que deseaba.

De igual manera funciona la vida espiritual y en esto estriba el crecimiento a que hemos sido llamados como cristianos, pues debe ser nuestro objetivo dar lo mejor para Dios y predicar el evangelio a toda persona que esté a nuestro alcance, sin desviar la vista del propósito.

Si desviamos nuestra mirada de nuestro objetivo crucial y primordial, que es servir a Dios, estamos en desventaja y podemos ser muertos espiritualmente…lo digo así, porque aunque somos salvos por gracia, por medio de nuestro Señor Jesucristo, por amor a Dios debemos proponernos llegar hasta la estatura perfecta a la que Dios nos llamó, y recuerden que hemos sido llamados a ser nación santa, real sacerdocio, y esto encierra responsabilidades delante de nuestro Señor y el tener testimonio de lo que profesamos.

Es innegable que Dios declara en múltiples oportunidades lo necesario que se hace que crezcamos en fe y conocimiento, pues solo así podremos ser parte del conglomerado que trabaja en la expansión de la Palabra de Dios y es que el mundo necesita a gritos la presencia de Dios en sus vidas.

Recordemos que no podemos dar lo que no tenemos, es necesario que nuestra lámpara espiritual este llena de aceite y que el Espíritu Santo de Dios more en nosotros para poder transmitir a los demás el amor de Dios y su Plan de Salvación.

Con tristeza veo como a los cristianos, se nos va la vida en pedir a Dios que nos prospere, que nos cuide, y no estamos focalizados en conocer los tiempos, que definitivamente son apocalípticos y entender que éste apremia significando momentos cruciales para la humanidad y que así como las profecías anteriores se han cumplido al pie de la letra, las que faltan también lo harán, aunque muchos la tienen por tardanza.

Aprendamos la lección del Rey, focalicémonos en alcanzar la meta de cuidar nuestra salvación y hacer que otros sean salvos. No permitamos que los afanes de este mundo nos distraigan.

¡Aprender de Dios y servirle es nuestra prioridad….lo demás, viene por añadidura!



Mayra De Peña

Lic. en Contabilidad, egresada de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), graduada de Periodista, en el Instituto Dominicano de Periodismo (IDP). Locutora, con un Diplomado en Comercio Exterior, y Diplomado en Política Estratégica. He desempeñado diversas funciones dentro del sector Privado y Gubernamental. Hija de Dios y amante de la naturaleza. Creo en vivir a plenitud de manera equilibrada y en lo significativo de quererse y valorarse como individuo. Soy una feliz madre de tres hermosas hijas, creo en el matrimonio, en la institución familiar y en la importancia de predicar con el ejemplo. Amo escribir y con ello transmitir mi sentir y sobre todo tengo en alto estima alimentar el espíritu, pues de él mana la vida.

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