SANTO DOMINGO.-“Cuidar adecuadamente de nuestra piel es esencial para un mejor aspecto y salud. Es necesario cuidar y tener una buena rutina diaria, en especial en los meses de verano.
Es en esta época del año es cuando debemos prestar más atención a su cuidado”.
Así lo afirma Sónica Then Reyes, dermatóloga, cosmiatra y cirujana dermatóloga, al explicar el decálogo que debe primar en esta temporada de calor, donde además de la altas temperaturas, incide una nube formada por polvo del desierto del Sahara y otras partículas que llega todos los años para esta época, empeorando significativamente la calidad del aire que respiramos.
La especialista destaca que esta tiene efectos negativos a nivel respiratorio y en la piel, sobre todo en pacientes que padecen dermatitis, rosáceas, acné y piel seca.
Agrega: “Puede provocar irritaciones, resequedad, picazón, y para evitar esto se recomienda una buena hidratación de la piel, usar jabones suaves, crema hidratante a base de urea, ceramidas, vitamina E, entre otras”. Indica que para cuidar el órgano más grande del cuerpo es vital la limpieza e hidratación, por ello dice que para disfrutar de una piel sana y gozar de un bronceado uniforme, es muy importante que la piel esté limpia y preparada.
Es muy importante, en especial la limpieza diaria de la piel con productos suaves que eliminen la suciedad sin alterar el manto ácido de la misma.
Hidratación correcta
“Si hay algo realmente importante en verano es una adecuada hidratación de la piel tanto de forma externa como interna. La falta de agua e hidratación en la piel se traduce en un aspecto seco, apagado e incluso descamado.
Las duchas, baños y el hecho de beber abundante agua pueden prevenir la deshidratación de la piel”, señala la doctora. Además, es conveniente aplicar cremas hidratantes en abundancia sobre todo en el cuerpo después de cada ducha, y usar jabones syndet sin jabón u óleo, geles de ducha, que la deshidratan menos.
Then Reyes, quien labora en el consultorio DermaThen en Acrópolis Center, explica que esto ayuda a proteger la superficie cutánea, haciendo que el agua quede retenida en el interior, hay que prestar especial atención a las zonas más secas, como talones, codos y rodillas.
También al rostro, es importante hidratarlo bien dependiendo de tu tipo de piel, con cremas antioxidantes y con ácido hialurónico porque aportan hidratación, luminosidad y ayudan a reparar el daño que ocasiona el sol en la piel.
Al hablar de una correcta protección manifiesta que uno de los principales errores que “cometemos en verano es el de aplicar protector solar si vamos a la playa o piscina a tomar el sol. Lo cierto es que el sol nos toma en cualquier zona exterior aunque llevemos la ropa puesta. Por ello, debes incorporar a la rutina de cuidado el uso de protectores solares a diario.
Sabios consejos
— La ropa ideal
Elige ropa de tejidos naturales y frescos que permitan la transpiración. Evitarás excesiva sudoración, reacciones por falta de transpirar.
—2— Come ligero
Consume frutas, verduras, alimentos ricos en antioxidantes, ya que ayudan a prevenir la degeneración celular.