San Juan.- Puertorriqueños afrodescendientes defendieron este martes en una vista pública en el Senado la necesidad de aprobar un proyecto de ley que busca prohibir la discriminación racial debida a los diversos estilos de peinado y cabello.
El objetivo del Proyecto 1282, que crearía la “Ley Contra el Discrimen por Razón de Estilos de Cabello”, es evitar esta discriminación en el ofrecimiento de servicios, empleo, educación y vivienda, tanto en el sector público como privado, en la diversa isla caribeña.
Una de las defensoras de esta medida es la famosa escritora puertorriqueña Mayra Santos Febres, quien alegó que es “muy importante” crear un protocolo para defender a los afrodescendientes del racismo.
El Gobierno puertorriqueño argumenta que la legislación es innecesaria porque otras leyes federales y locales ya prohíben ese tipo de discriminación, pero los activistas aseguran que la comunidad afrocaribeña de la isla necesita una protección explícita en algunos casos.
Ante la Comisión de Derechos Humanos y Asuntos Laborales del Senado, la joven afrodescendiente Alanis M. Ruiz Guevara denunció que “el discrimen hacia los cabellos afro y los peinados protectores no es uno personal sino sistemático».
La joven explicó que con solo 8 años le prohibieron acudir a clases en la escuela con trenzas estilo “cornrows” (trenza africana cosida) y que, desde los 9 hasta la adolescencia, se sometió a alisados para evitar problemas.
Por su parte, Lorraine León Ramírez, una mujer blanca madre de dos jóvenes afrodescendientes, explicó que a sus hijos les dijeron en el colegio que tenían el pelo afro demasiado “alto” y debían cortárselo.
“Es hora de romper con esos estigmas”, aseveró en la vista pública sobre el proyecto, que lleva la firma de los senadores Ana Irma Rivera Lassén y Rafael Bernabe Riefkhol, del Movimiento Victoria Ciudadana (MVC).
La comunidad afrodescendiente sigue sufriendo discriminación y baja representación en Puerto Rico, lo que llevó en 2021 a promulgar la Ley 24, que designa la “Semana para la Erradicación del Racismo y Afirmación de la Afrodescendencia».
En el censo de 2020, el porcentaje de residentes de Puerto Rico que se identificó de raza negra -solamente o en combinación con otra raza- aumentó al 17,5 %, mientras que casi un 50 % eligió la opción de dos razas o más.