SANTO DOMINGO.-El debate en torno a la viabilidad legal de las tres causales del aborto ha desviado la atención de la ciudadanía del contenido del proyecto de Código Penal que se estudia en la Cámara de Diputados.
La iniciativa, que es propuesta del presidente del hemiciclo, Alfredo Pacheco, pretende sustituir el Decreto-Ley No. 2274 del 20 de agosto de 1884 y que, en intentos de ser actualizado ha sido observado en dos ocasiones por el Poder Ejecutivo tras no haberse incluido las tres causales que permitirían abortar en condiciones especiales.
La nueva propuesta incluye importantes actualizaciones en lo referente a modalidades delictivas propias de los cambios sociales en los últimos 136 años.
Penaliza los negocios de multinivel o piramidales, esos que no se sustentan en la transferencia de ningún bien o servicio, que basan sus ganancias en el reclutamiento de personas y cuyos entusiastas promotores estafan cada cierto tiempo a un grupo significativo de ciudadanos.
También instituye como delito el trato cruel, inhumano o degradante; contiene instrucciones más completas en cuanto a la violencia de género y endurece las penas para crímenes más comunes como la violación sexual, el robo y la estafa.
Inicio de deliberaciones
Las intenciones de reformar el Código Penal iniciaron en 1997, fue aprobado en 2006, observado y devuelto al Congreso, mismo proceso que se repitió en el año 2016. En ambos casos, estuvo presente el debate sobre el aborto.
Como vía de salida, Pacheco optó por excluir de su propuesta de Código Penal las tres causales.
En su lugar, un proyecto alterno, depositado por el diputado Rubén Maldonado, se encargaría de atraer los debates que lideran grupos sociales diversos en pro y en contra de las causales.
La eximente
La actual propuesta, que ya fue presentada por la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, incluye una eximente en su artículo 112 que lo que hace es garantizar al personal médico no ser condenado en casos extremos, en los cuales, para salvar la vida de la mujer, se requiere interrumpir el embarazo.
Sin embargo, esta salida ha sido rechazada por las organizaciones que defienden las causales, las cuales argumentan que al introducir un proyecto de Ley alterno lo que se pretende en realidad es relegar sus exigencias.
Esto las ha llevado a protestar en la parte frontal del Palacio Nacional con la esperanza de que al igual que en 2006 y 2016, el Código Penal no sea promulgado.
Al tratarse de un punto de fuertes convicciones cristianas en el caso de los grupo provida, se recurrirá, al igual que en el pasado, a no bajar líneas partidarias para votar.
Hasta el momento, la oposición de los legisladores a las tres causales es visiblemente mayoritaria y algunos de ellos se encuentran en un proceso de recolección de firmas en ambas cámaras para que, antes de iniciar los debates, la ciudadanía tenga una constancia numérica de sus posturas individuales.
Largo camino
En la actualidad los diputados están —para fines de procedimiento—, leyendo el informe de la comisión de justicia que a la vez contiene el proyecto de Código Penal.
Por orden natural, deberá de procederse a leer un informe disidente presentado por el diputado José Horacio Rodríguez antes de pasar a las deliberaciones, votar por el informe disidente, votar por el informe de la comisión y votar por el proyecto en sí.
Por lo que, antes de que la pieza llegue al Senado y luego pase al Poder Ejecutivo, pasarán varias semanas.
El diputado Alexis Jiménez, quien preside la Comisión de Justicia de los diputados, ha dicho que aspiran a darle al país un código acorde a los nuevos tiempos.
Parte del recorrido
—1— Complejidad
Las observaciones del Poder Ejecutivo en el año 2006 no solo se limitaron a las causales del aborto.
—2— Detalles
Incluían variados aspectos, muchos de los cuales reposan en la actual pieza que se estudia.
—3— Aporte
La misma ha sido fortalecida desde distintas fuentes propositivas.