No había tantas instalaciones deportivas y fueron las frágiles estructuras de voleibol y gimnasia las que sufrieron daños mayores en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte con el paso del ciclón David en agosto de 1979.
Habían sido levantadas en 1974 para los Docejuegos (XII Juegos Centroamericanos y del Caribe).
El Palacio de los Deportes (no se llamaba Virgilio Travieso Soto) recibió lesiones en su techo de gajos de naranja y por su fuerte estructura posteriormente sirvió de refugio a damnificados del fenómeno natural.
En 1998 el huracán Georges (con s) causó estragos en el este, y afectó los estadios Tetelo Vargas y Francisco Micheli y por ello Estrellas y Azucareros no jugaron en la campaña de béisbol 1998-99.
Los Azucareros extendieron su receso otra campaña. David y Georges son los dos fenómenos recientes de más peligrosidad que han atacado el país y ahora parece inminente la llegada de Irma. ¡Ojalá que no!
La recuperación tras el paso de un ciclón, principalmente en perjuicios de vidas humanas, viviendas, agropecuaria, vías, acueductos e infraestructuras, resulta traumática para un país. ¡Qué Dios nos dé la suficiente fortaleza y sabiduría!