Santo Domingo.-Con la creación de una comisión para investigar el proceso de licitación y adjudicación de la Central Termoeléctrica Punta Catalina a la constructora brasileña Odebrecht, el presidente Danilo Medina busca “revestir de credibilidad” la única obra de su gobierno que tiene a su cargo esa compañía.
Así lo aseguró ayer el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, tras avalar la credibilidad e independencia de los miembros de la comisión escogidos por el mandatario.
Dijo que la gran cantidad de cuestionamientos en torno a la construcción de las plantas de carbón y su costo de cerca de dos mil millones de dólares es más que suficiente para iniciar una investigación paralela sobre la misma que, según la carta enviada a los comisionados y el propio decreto, no interferirá con el trabajo que realiza el Ministerio Público en torno a todas las obras realizadas por Odebrecht en el país, incluyendo Punta Catalina.
Trabajo de la comisión
Mientras que monseñor Agripino Núñez Collado, presidente de la comisión, informó que a partir de hoy iniciará las llamadas a los demás miembros para fijar la reunión donde determinarán la metodología y organigrama del trabajo que realizarán para la investigación sobre la licitación y adjudicación de la construcción de las plantas de carbón de Punta Catalina al consorcio Odebrecht.
Dijo que ayer solo dos de los miembros de la comisión integrada por nueve personas le habían llamado. “Tengo que enterarme bien de cuál va a ser nuestro papel.
El decreto dice que de ninguna manera la comisión va a sustituir el trabajo que está haciendo la Procuraduría General de la República”, adujo monseñor
Punta Catalina listo 2018
El proyecto Punta Catalina, que se prevé será concluido en el tercer trimestre del año 2018, consiste en la construcción de una central termoeléctrica con una capacidad de 720 megavatios (MW), integrada por 2 unidades de 360 MW cada una, para la generación de energía a partir de la quema limpia de carbón mineral pulverizado.
Contará con la instalación de una terminal de recepción de carbón para barcos autodescargantes, con una capacidad máxima de 80 mil toneladas, así como todas las instalaciones de apoyo. Los equipos serán de última generación, fabricados e instalados bajo los más altos estándares internacionales, lo cual garantizará el suministro de energía eléctrica por más de 25 años.