SANTO DOMINGO.– Presidentes y jefes de delegaciones se reúnen este sábado en la XXVIII Cumbre Iberoamericana donde fijarán, debatirán y plantear soluciones a los acuerdos consensuados ayer por los ministros y representantes de los 22 países miembros de la Confederación Iberoamérica.
Tras la sesión plenaria en las que los dignatarios tomarán las decisiones y soluciones a los importantes retos que enfrenta la región, será firmada la declaración de Santo Domingo.
En el diálogo que dirigirá el presidente Luis Abinader se adoptarán tres documentos: La Ruta crítica de seguridad alimentaria incluyente y sostenible en Iberoamérica, con el fin de garantizar el disfrute del derecho a la alimentación de todas las personas; la Carta Medioambiental Iberoamericana, que refleja la visión compartida de la comunidad iberoamericana frente a los desafíos globales del cambio climático y la búsqueda de acciones que garanticen un desarrollo sostenible y respetuoso de la naturaleza, y la Carta Iberoamericana de Principios y Derechos en los Entornos Digitales, que procura, entre otros temas, garantizar el ejercicio de los derechos fundamentales y las responsabilidades en la construcción de sociedades digitales inclusivas, justas, equitativas e igualitarias.
Apertura
Durante el acto de apertura realizado ayer en la Fortaleza Ozama, el presidente de la República, Luis Abinader, aseguró que para revitalizar las democracias es indispensable mantener la defensa de la libertad, el bienestar colectivo y una acción pública libre de sectarismos.
Durante su discurso en el que dio la bienvenida a los jefes y jefas de Estado y de Gobierno que participan en la XXVIII Cumbre Iberoamérica, el mandatario dominicano auguró a las delegaciones que su estadía sea fructífera y que espera que “logremos grandes jornadas de trabajo”.
La Cumbre Iberoamericana de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno es la máxima instancia de la Conferencia Iberoamericana, un mecanismo de concertación política y cooperación de los países que conforman la comunidad. Fue creada en julio de 1991 en la ciudad Guadalajara, México, con el objetivo de desarrollar los ideales de Iberoamérica con base en el diálogo, la cooperación y la solidaridad.
El organismo está integrado por Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay, Venezuela, España, Portugal y Andorra.