Cultura dominicana: París y Madrid

La cultura, en tanto que conjunto vivo y en constante transformación, de bienes materiales, intangibles y espirituales, que permiten el acento particular de un conglomerado humano y un Estado en el cada vez más diverso y abierto concierto de las naciones del mundo globalizado, ha ido forzando el cambio de su anterior condición de sirvienta de las herramientas de la diplomacia, para ir alcanzando primeros planos de interés y valoración.

Carecemos, aunque hay visos de cambio, de una sistemática estrategia de Estado para que los bienes y actores de la cultura, en sus múltiples manifestaciones, cumplan el necesario rol de elevar la marca país mediante la promoción de nuestras riquezas culturales.

Sin embargo, debemos celebrar el esfuerzo de dos embajadas de República Dominicana en Europa, y sus respectivos titulares, cuyo esfuerzo por hacer sentir culturalmente nuestro país en el inmenso escenario de Europa, y particularmente, en París y Madrid, ha cobrado fuerzas en las últimas semanas.

Del 24 de mayo al 5 de junio, Francia llevó a cabo, por cuarto año consecutivo, la Semana de América Latina y el Caribe, con un amplio programa que tuvo como escenarios diferentes ciudades de su territorio. En ese contexto, la embajadora dominicana en el país galo, Rosa Hernández de Grullón, organizó la “Gran noche cultural dominicana (Artes visuales, gastronomía y folclore)”, a la cual asistieron personalidades de la política, la diplomacia, la intelectualidad, los negocios y la cultura en general de Francia, así como nacionales nuestros radicados allí.

La noche, en la que al pronunciar su discurso, la embajadora resaltó su misión de fortalecer las relaciones de intercambio económico, institucional y cultural entre las dos naciones, contó con la participación del expresidente Leonel Fernández, quien improvisó una disertación acerca de la influencia de las raíces clásicas y modernas de la cultura francesa en los procesos culturales e históricos de pueblos de Latinoamérica y el Caribe.

Además, el destacado artista, crítico e historiador de arte, Danilo de los Santos, disertó sobre la pintura dominicana y su relación con la cultura gala, en base a una exposición de pinturas de 25 maestros dominicanos, que auspició el Banco Popular Dominicano.

Además, la folclorista Manuela Féliz deslumbró a los presentes en el acto con un recorrido histórico y escénica muestra, de manos de dos bailarines profesionales, de los distintos ritmos y danzas que integran el folclor de nuestro país.

Al finalizar la noche, los asistentes disfrutaron de una selecta y exquisita degustación de platos de la cocina dominicana, preparada y montada por las chefs Sharinne Gómez y Lizzie Acevedo.

Al día siguiente, el río Sena continuaba su crecida e inundación de barrios y muelles, a causa de la lluvia, subiendo su cauce en 6.06 metros, comparables con los niveles históricos alcanzados en 1910, de 8.62 metros y 1982, de 6.18 metros.

El otro caso de importancia para la proyección de nuestra cultura en Europa es el del embajador Aníbal de Castro, quien ha logrado que por vez primera la República Dominicana esté oficialmente presente en la prestigiosa Feria del Libro de Madrid 2016, que alcanza su 75 edición, en el emblemático Parque de El Retiro, con un programa que abarca exhibición y presentación de libros, conferencias y la participación, a través de lecturas y firmas autográficas de escritores, algo muy usual en esta feria, de representantes de nuestra literatura e historiografía como Soledad Álvarez, Aralis Rodríguez, Miguel Reyes Sánchez, Dulce Elvira de los Santos, Genaro Rodríguez Morel, Franklin Gutiérrez, Sol Lora y Bernardo Silfa Bor. La cultura dominicana vibra con fuerza en el corazón de Europa.