Durante años, el huevo fue el protagonista de una controversia en torno a su impacto sobre los niveles de colesterol. Por mucho tiempo se creyó que su consumo elevado contribuía directamente al aumento del colesterol en sangre y, por lo tanto, incrementaba el riesgo de enfermedades cardíacas. Sin embargo, estudios recientes demostraron que esto es un mito.
Según la Comisión Internacional del Huevo (IEC), el huevo, especialmente la yema, es una fuente rica de nutrientes esenciales, que incluye grasas saludables y colesterol dietético, pero su impacto en el colesterol sanguíneo es menor de lo que se creía.
De hecho, investigadores de la Universidad de Castilla en España encontraron que el consumo regular de huevos puede incluso mejorar el perfil lipídico, al aumentar los niveles de la “lipoproteína buena” (Apolipoproteína A1), que ayuda a eliminar el colesterol de los vasos sanguíneos y protege contra enfermedades cardiovasculares.
El doctor Alberto Cormillot, especialista en obesidad, también desmintió a Infobae la creencia de que el huevo aumenta el colesterol peligrosamente, y aseguró que su consumo diario es beneficioso en el marco de una dieta equilibrada, salvo que exista alguna contraindicación médica específica.
Beneficios del huevo para la salud
El huevo es una de las fuentes más completas de proteínas disponibles de forma natural, con los nueve aminoácidos esenciales que el cuerpo humano no puede producir por sí mismo.
Además, contiene 13 nutrientes esenciales, entre ellos vitaminas A, D, E y B12, así como minerales como hierro, calcio, fósforo y zinc. La Universidad de Castilla destacó que el huevo es también uno de los alimentos más rentables y sostenibles, siendo una fuente accesible de nutrientes bioactivos.
En la yema se concentra la mayor parte de las vitaminas y minerales del huevo, junto con lecitina, una sustancia que beneficia el cerebro, el corazón y el sistema nervioso. Esto hace que el consumo de huevos enteros sea una excelente opción para quienes buscan mejorar su salud general y su capacidad para desarrollar masa muscular.
¿Cuántos huevos se pueden comer por día?
Comer un huevo diario es completamente seguro para la mayoría de las personas y puede tener múltiples beneficios, como mejorar la composición corporal y reducir el índice de masa corporal (IMC).
Según los expertos de la Universidad de Castilla, la ingesta de huevos está asociada con un aumento en la masa magra (peso del cuerpo sin contar las grasas), lo que puede ser útil en la gestión del peso y la mejora de la salud metabólica.
Además, dado su alto contenido en proteínas y grasas saludables, son una excelente opción para incluir en el desayuno, ya que generan una sensación de saciedad duradera. Esto puede ayudar a evitar el “picoteo” entre comidas y mantener niveles de energía estables a lo largo del día.
Dicho esto, la cantidad recomendada por día puede variar según las necesidades y condiciones individuales de cada persona, pero en general, los expertos coinciden en que comer un huevo al día es seguro para la mayoría de las personas.
Por lo tanto, incluir uno o dos huevos diarios en la alimentación, dentro de una dieta balanceada, no representa un riesgo para la salud cardiovascular, y puede aportar importantes beneficios nutricionales.
Eficacia del huevo en la pérdida de peso
El huevo es un alimento que ganó popularidad en dietas para la pérdida de peso debido a su capacidad para acelerar el metabolismo y su bajo contenido calórico. De hecho, algunos estudios indican que comer huevo puede aumentar el metabolismo hasta en un 30%.
Además, su riqueza en proteínas y grasas saludables genera saciedad, lo que contribuye a consumir menos calorías durante el día.
Por todo esto, la llamada dieta del huevo se viralizó en redes sociales como un plan de adelgazamiento. Sin embargo, este régimen es muy restrictivo y no está diseñado para ser seguido durante largos periodos de tiempo. Siempre se recomienda la supervisión de un nutricionista antes de iniciar cualquier plan alimenticio.
Cómo es la dieta del huevo: alimentos permitidos y prohibidos
La dieta del huevo se basa en el consumo de huevos junto con otros alimentos bajos en carbohidratos y ricos en proteínas. Entre los alimentos permitidos en esta dieta se encuentran:
- Huevos en todas sus formas.
- Proteínas magras como pollo, pavo, cerdo y pescado (atún, salmón, bacalao).
- Verduras de hoja verde como espinaca, rúcula y col rizada.
- Frutas bajas en azúcar, como el pomelo y el limón.
Por otro lado, se deben evitar ciertos alimentos como:
- Lácteos: leche, queso y yogur.
- Cereales: pan, pasta y avena.
- Bebidas y alimentos con azúcar añadido: jugos, refrescos y postres.
- Carnes procesadas: tocino, salchichas y hamburguesas.
Fuente: Infobae