Puerto Plata.- Una lluvia de críticas ha generado en el sector pesquero de Puerto Plata la retención por más de nueve días de una embarcación que regresaba el banco de La Plata, que fue prácticamente “secuestrada” sin ninguna explicación por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y la Armada de República Dominicana (ARD).
Se informó que el barco pesquero “Emily” matrícula BP-E81-765PP, fue interceptado la madrugada del pasado viernes 30 de septiembre por el guardacosta Bellatríx GC-106 de la Armada de República Dominicana y en una actitud hostil no le permitió llegar como es costumbre al viejo muelle de Puerto Plata obligando a dicha embarcación a entrar al nuevo espigón donde allí lo esperaba con un gran aparataje varios agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Luego de que fue hostigado por el guardacosta militar que lo obligó a atracar en el muelle nuevo de Puerto Plata, el barco pesquero “Emily” fue inspeccionado por los miembros de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) armados con fusiles FAL, ametralladoras UZI y pistolas automáticas, los cuales de manera ilegal y sin la presencia de un representante del Ministerio Público sacaron encañonados a sus tripulantes y procedieron a revisar la motonave de manera exhaustiva.
Ninguno de los agentes ni oficiales de la DNCD dieron explicaciones sobre las razones que motivaron a realizar un allanamiento a dicha embarcación para lo cual también utilizaron una unidad canina y dos horas después ante las exigencias de los propietarios de la nao, fue que permitieron el acceso de un procurador fiscal adjunto quien en todo momento supervisó las acciones de requisa y luego de casi 15 horas certificó que en dicho barco pesquero no se encontró drogas, ni nada comprometedor.
A pesar de que no hallaron nada tras el amplio operativo de revisión al pesquero, de manera abusiva, los miembros de la DNCD en complicidad con oficiales de la Marina de Guerra en Puerto Plata, se mantuvieron custodiando celosamente dicho barco y de forma imprudente a casi una semana después fue que la comandancia general de la Armada emitió un declaración al respecto, pero que no se corresponde con la realidad.
Según lo informado por la institución naval luego de la presión ejercida en los medios de comunicación y ante la fiscalía de Puerto Plata por los familiares de los 43 tripulantes del buque pesquero, fue que supuestamente la retención de dicho barco se debió a que en el mismo fueron decomisadas unas 313 fundas de lambí, molusco marino que se encuentra en veda y que funcionarios del Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura (CODOPESCA) incautaron las mismas.