Una vez concluido el proceso de cuarentena del coronavirus y volver a las labores cotidianas, es posible seguir presentando síntomas asociados con el virus. Esas personas son llamadas «enfermos a largo plazo», y la enfermedad se conoce como síndrome post-Covid-19 o “Covid-19 larga».

“Los adultos mayores y las personas con muchas afecciones graves son los que más probablemente presenten síntomas persistentes, pero incluso las jóvenes y sanas pueden sentir malestar durante semanas o meses después de la infección.

Los signos y síntomas más comunes que persisten con el tiempo incluyen fatiga, falta de aire al respirar, tos, dolor en las articulaciones, dolor en el pecho”, según la Clínica Mayo.

Otros signos y síntomas a largo plazo pueden incluir: dolor en los músculos o dolor de cabeza, latidos rápidos o fuertes del corazón, pérdida del olfato o del gusto, problemas de memoria, de concentración o para dormir, erupciones o pérdida del cabello.

Quienes hemos sufrido los efectos severos o ligeros del virus sabemos que ciertamente esos efectos perduran. Sin embargo, la verdadera alarma está en el hecho de que pueden acarrear enfermedades graves como las pulmonares, cardiacas, cerebrales, circulatorias.

También podrían desarrollarse enfermedades renales y hepáticas según las investigaciones.
Muchos investigadores no se aventuran a hacer afirmaciones categóricas, pero cuando relacionan este virus con otros del pasado, aseguran que los efectos de esas epidemias dejaron problemas a largo plazo, como podría suceder con el actual virus que lidiamos.

La recomendación es observar de cerca a los enfermos para poder intervenirlos a tiempo. Si quieres aprender más, sigue esta serie de artículos o contactame para seguimiento personalizado.