New York.- En un giro absolutamente inesperado, Carlos Correa aceptó firmar un contrato de 315 millones de dólares por 12 años con los Mets de Nueva York, después que su acuerdo pendiente con los Gigantes de San Francisco se desmoronó.

El codiciado agente libre de 28 años aceptó un contrato con los Mets sujeto a una evaluación médica, que fue precisamente el problema con los Gigantes. “Necesitamos una cosa más, y es esta”, dijo el dueño de los Mets, Steve Cohen desde Hawái. “Con esto estamos colmados”.

Cohen se encontraba en Hawai cuando negoció el contrato con el agente de Correa, Scott Boras, según el Post. Correa, un campocorto All-Star, sería el tercera base en el elenco estelar de los Mets, mientras su amigo y compatriota puertorriqueño Francisco Lindor continuaría como torpedero.

“Esto significa una gran diferencia”, dijo Cohen. “Pensé que estábamos bien en cuanto a lanzadores. Necesitábamos un bateador más”.

La adquisición de Correa incrementaría el monto del impuesto de lujo en la nómina de los Mets el año próximo al acercarse a los US$385 millones. Tendrían que pagar un gravamente récord de casi US$110 millones duplicando el actual tope de 44 millones que los Dodgers de Los Ángeles fijaron en 2015.

Excepcional

— LUJOSO
Correa le costaría a los Mets US$49,88 millones en salario e impuestos en caso que no se incluyó dinero diferido en el acuerdo. Una fuente dijo que el acuerdo de Correa y los Gigantes se canceló por un problema médico.