Hace unos días fue relanzada la Cámara de Comercio Domínico-Coreana (DomChamCorea), con la presencia del Ministro de Industria y Comercio, Ito Bisonó, el Viceministro de Relaciones Exteriores Hugo Rivea, el embajador de la República de Corea (Corea del Sur) en la República Dominicana (RD), Inho Lee y el dominicano en Corea, Federico Cuello.
Además en dicha actividad fue presentado Avelino Rodríguez como nuevo presidente de la Cámara.
A propósito de ese acontecimiento, creo propicio hablar de las relaciones bilaterales entre Corea del Sur y RD, origen, evolución y principales logros alcanzados entre las partes.
Hace 59 años, el 6 de junio de 1962, se establecieron las relaciones diplomáticas. Los primeros embajadores concurrentes se designan en el año 1969 y es en abril de 1983 que se abren las primeras sedes permanentes de las embajadas, la dominicana en Seúl y la coreana en Santo Domingo.
El primer viaje de un Jefe de Estado dominicano a Corea lo realiza el presidente Leonel Fernández, del 29 de junio al 1 de julio del 2006. Durante su permanencia en Seúl se reunió con el presidente coreano Roh Moo-hyun, y firmaron algunos acuerdos de importancia para las partes y sobre todo para la RD. Hasta ahora, ningún presidente coreano ha visitado la RD.
Entre los acuerdos firmados por los dos países en estos 59 años de relaciones diplomáticas destacan: el suscrito el 9 de abril de 1968, con el objeto de desarrollar las relaciones en los campos de la cultura, el arte y la tecnología; el de febrero de 1982, que permite el desarrollo de programas concretos de cooperación, integrados por proyectos específicos de interés común en áreas determinadas, facilitando los intercambios de expertos, las investigaciones, adiestramiento de personal científico; el firmado 30 de junio del 2006, para crear condiciones favorables para las inversiones realizadas por los ciudadanos y las sociedades de una parte en el territorio de la otra, y viceversa.
Ahora, que contamos en Seúl con la presencia del embajador de carrera Federico Cuello, destacado diplomático que se ha caracterizado por dar resultados, apuesto al fortalecimiento de estas relaciones, de los intercambios comerciales, económicos, pero sobre todo, culturales y de experiencias vividas, porque es obvio que de Corea es mucho lo que podemos aprender, países que como la RD lo tienen todo para desarrollarse y lo que les falta para hacerlo es precisamente lo que les sobra a ellos. Adelante.
