Consumo de alcohol es asociado al desarrollo de enfermedades

Consumo de alcohol es asociado al desarrollo de enfermedades

Consumo de alcohol es asociado al  desarrollo de enfermedades

people drinking beer, shot from overhead

Santo Domingo.-El consumo de alcohol es un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos, dice el neurólogo internista Edwin Espinal.

Prosigue que la ingesta de bebidas está asociada con el riesgo de desarrollar problemas de salud, como trastornos mentales y de comportamiento, incluido el alcoholismo.

También enfermedades no transmisibles, como la cirrosis hepática, algunos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares.

Pero esto no termina ahí, el galeno añade, además, traumatismos derivados de la violencia y los accidentes de tránsito.

El especialista muestra preocupación porque pese a los intentos de las autoridades por preservar vidas muchos optan por tomar bebidas alcohólicas sin ningún tipo de control, lo que según las estadísticas de los organismo de socorro termina con la vida de ellos y de otros que estén en su entorno.

Espinal explica que el alcohol es un líquido incoloro, de olor fuerte e inflamable que se obtiene por destilación de productos de fermentación de sustancias azucaradas o feculentas, como la uva, la melaza, la remolacha o la papa, y forma parte de numerosas bebidas (vino, ron, whisky, cerveza).

El galeno precisa que el alcohol produce un efecto tóxico directo y también sedante sobre el organismo; además, la ingesta excesiva durante periodos prolongados conduce a carencias en la nutrición y en otras necesidades orgánicas, lo cual complica la situación. Los casos avanzados requieren hospitalización.

“El alcohol actúa como depresor del sistema nervioso central. Por sus características, esta droga pasa con gran rapidez a la sangre y actúa a nivel de la formación reticular, sobre la médula espinal, la corteza cerebral y el cerebelo, así como sobre infinidad de sistemas de neurotransmisión”, indica Espinal.

Destaca que el consumo de alcohol puede conducir a la dependencia. En este caso la situación se agrava, dice el galeno, con síntomas habituales de náuseas, temblores, alteración del sueño y hasta alucinaciones y convulsiones.

Explica que también se pueden producir daños sobre el sistema nervioso, como lesión de los lóbulos frontales del cerebro, disminución general del tamaño del cerebro (atrofia cerebral), deficiencia vitamínica derivada de la incapacidad de absorción de la vitamina B-1.

Lo que a su vez, apunta el especialista, puede provocar el síndrome conocido como Encefalopatía de Wernicke, caracterizado por pérdida de la memoria y falta de coordinación, y en última instancia el Síndrome de Korsakoff, descrito en términos de apatía, desorientación y amnesia.

En el caso de la población infantil, independientemente de la cantidad o la frecuencia con que se permita que tomen alcohol, esto les genera daños en su organismo, los expone a mayores riesgos y es ilegal.