Estamos al final de un período fiscal, donde las empresas deben construir sus planes estratégicos para el próximo año y tres o cincos más adelante, que les sirva de camino hacia sus metas y objetivos a corto y largo plazo.
Por más insignificante que usted entienda sean los proyectos de una organización, necesitan tener una planificación para obtener el éxito con la mejor calidad, costo y tiempo.
En esta ocasión quiero dejarles algunos conceptos, que no deben olvidarse en la toma de decisiones, para mantener el crecimiento sano y la creación de riquezas en cualquier proyecto comercial, a ver:
1.-Fijarse metas de ventas sin tomar en cuenta las utilidades
Vender mas no siempre significa ganar más. Muchas acciones para llegar a una mayor venta, no siempre nos van a dar los resultados esperados, por lo que debemos revisar si la inversión para lograrlo mantiene una relación con el crecimiento en que pueden resultar las utilidades.
Lo saludable es que cada inversión nos proporcione un % mayor de beneficios que el que tenemos en la actualidad, de lo contrario, estaríamos invirtiendo más dinero y esfuerzo sin recompensa.
2.-Las decisiones no deben estar en función de los beneficios.
De por si las utilidades no generan riqueza. Incluso se pueden generar utilidades y no haber distribución de ella, pero también no haber efectivos, liquidez para atender los compromisos, gastos e impuestos. Asimismo, podemos desenfocarnos en los objetivos de la empresa que nos garantizan la sostenibilidad.
3.-No vigilar las unidades, productos, sucursales etc. su efectividad y eficiencia.
A veces como siempre hay disponibilidad y recursos para atender todos los requerimientos, perdemos de vista la rentabilidad de una unidad producto, sector o dptos. que se subsidia sin darnos cuenta de la cantidad, volumen de recursos que se disgrega con su consecuente pérdida de valor para la empresa.
4.-Mal manejo de inventario y exceso de caja.
Los inventarios parqueados como los fondos en la caja tienen un costo financiero que reduce los beneficios de las ventas. No debemos nunca dejar de vigilar los niveles y las condiciones específicas de nuestros inventarios, además de evitar la caducidades y perdidas.
5.-Administración deficiente de los recursos humanos.
El talento es uno de los recursos más valorado en la actualidad. Y básicamente para las empresas de servicio, donde el factor humano es vital. Formar buenos equipos e invertir en su formación requiere de recursos. Cuando tenemos fuga y alta rotación, las empresas se desequilibran, pierden balance y productividad.
6.-Información, comunicación, innovación y tecnología. Cada vez tenemos clientes más informado y exigente ante la liberación y globalización de los negocios, las empresas deben mantenerse en constante movimiento a la modernización. Requerimos de procesos bien estructurados que nos mantengan en la línea de fuego.
7.-Comprar inmuebles.
A veces suena bien, dejar de pagar alquiler cuando tenemos plata para comprar el inmueble, pero no somos ni estamos en el negocio inmobiliario, y dejamos de invertir en lo esencial para mantener el dinamismo que demanda el negocio donde somos exitoso. Mientras podamos mantener los costos fijos sin afectar el desarrollo, es lo más conveniente.
Espero este humilde aporte les sirva a nuestros lectores, haciéndole la salvedad de que si vivimos el día a día como vengan las circunstancias, nunca tendremos el control para llegar al final de nuestros propósitos de servir. La recompensa será siempre mayor, cuando somos proactivos, viendo lo mas importante con el fin en mente, aportando para que todos seamos ganadores.