Santo Domingo.- A veces parece imposible eliminar esas terribles e indeseables espinillas, las cuales aparecen en el momento más inoportuno.
Entre las causa del acné se encuentran el exceso de estrés, desajuste hormonal, o una mala alimentación, pero en cualquier caso, los dermatólogos recomiendan resistirse a exprimir los barros o espinillas por varias razones:
Puede dejar de cicatrices, o peor aún, una infección. Cuando hacemos estallar una espinilla, en realidad estamos desgarrando la piel en el proceso. También estamos introduciendo bacterias de las manos en la herida abierta, que por lo tanto puede infectarse o dejar una cicatriz permanente.
Los dermatólogos aseguran que hay algo llamado “triángulo de la muerte” (ojos, nariz y boca) —es llamada así por que si tenemos una infección en esta zona corremos el riesgo de morir— ¿Cómo es eso? Los vasos sanguíneos que recorren estas áreas del rostro suben a la parte posterior de la cabeza, en la base del cerebro. Esta zona también se abre hacia los senos.
Por lo tanto si tienes una infección en la nariz, aunque sea cutánea, si no se trata a tiempo puede ser muy grave, puede provocar parálisis, pérdida de la visión o incluso la muerte.
Pero, si tienes las espinillas no tienes por qué resignarte a dejar que ese molesto grano permanezca en tu cara eternamente.
Prueba a combinar la utilización de un producto dermatológico específico con otros remedios caseros para eliminar la espinilla en un abrir y cerrar de ojos.
Aplícate ácido salicílico. El tratamiento dermatológico más comúnmente recomendado para el acné y las espinillas es el ácido salicílico.
Este ácido es un principio activo que elimina las bacterias de forma segura para la piel y absorbe el exceso de sebo que obstruye los poros favoreciendo la aparición de espinillas y puntos negros.
Busca un tratamiento de uso localizado que incluya ácido salicílico en su composición, y aplícalo sobre el grano en cuanto notes que empieza a salir. También puedes utilizar algún jabón facial con ácido salicílico para ayudar a reducir el acné y evitar futuros brotes.
Mantén tu piel limpia. A lo largo del día la contaminación del aire, el sudor y la suciedad se adhieren a la piel, empeorando el acné o los granos. Lávate la cara dos veces al día, y lleva toallitas limpiadoras siempre contigo para utilizarlas en cuanto notes el cutis excesivamente graso, sudoroso o sucio, dejando la piel fresca y limpia en un momento. Las toallitas son especialmente prácticas después de hacer deporte o en las épocas más cálidas del año.